colapso en la búsqueda del proceso de resolucion
El Gobierno español elude confirmar los contactos con ETA
Una vez más el Gobierno español y el PSOE negaron la existencia de reuniones con ETA y con Batasuna y trataron de desacreditar a GARA en respuesta a la información publicada ayer.
I.I. | GASTEIZ
Periodista -«¿Mantuvo el Gobierno contactos con ETA durante la pasada campaña?».
Vicepresidenta- «Ninguno. Absolutamente ninguno».
La información publicada ayer por GARA en la que daba cuenta de que Gobierno y ETA por un lado y Batasuna y el PSOE, por otro, mantuvieron negociaciones simultaneas en la misma ciudad europea los días 14, 15, 16 y 21 de mayo, sin llegar finalmente a un acuerdo, fue abriéndose paso en la mañana de ayer en los medios vascos y españoles. Por tanto, era inevitable que la cuestión surgiera en la rueda de prensa que cada viernes ofrece María Teresa Fernández de la Vega al término del semanal Consejo de Ministros.
La pregunta, como ha quedado escrita, fue directa y la respuesta, tajante.
Sin embargo, después, cuando se la formularon de otra forma, llegaron las evasivas. A la vicepresidenta le inquirieron sobre si alguien, en nombre del Gobierno español, había mantenido contactos con ETA durante el mes de mayo. María Teresa Fernández de la Vega contestó que si la cuestión se refería a «esas informaciones que están saliendo en un medio de comunicación -en alusión a la noticia publicada por este diario-, yo quiero señalar que, como siempre, el Gobierno no comenta nunca este tipo de informaciones, ni sobre el medio que las publica, nunca, nunca me habrán oído ese tipo de comentarios».
A renglón seguido, añadió que había algo que quería trasladar a la opinión pública, que «ETA no ha conseguido nunca ni uno sólo de sus objetivos, ni uno sólo, de ningún tipo, no lo ha logrado tras 40 años empleando la violencia y nunca lo va a conseguir». «Eso -concluyó- es todo lo que el Gobierno quiere comentar sobre este asunto y sobre la banda terrorista ETA».
«Crean al Gobierno»
La información publicada por GARA destacaba que en un mismo lugar se habían dado dos tipos de encuentros. Los del Gobierno con ETA y los del PSOE con Batasuna. El Partido Socialista también trató de desmentir la veracidad de lo afirmado por este diario. El encargado del mentís fue el portavoz del grupo parlamentario en el Congreso, Diego López Garrido, y los términos fueron también contundentes.
Según sus palabras, «no ha habido ningún tipo de contacto entre el Gobierno y ETA ni entre el PSOE y Batasuna desde el momento en que se produjo la ruptura de hecho del alto el fuego permanente con el atentado de la Terminal 4 de Barajas».
López Garrido destacó que a partir de ese momento la «esperanza que se había abierto después de tres años y medio sin asesinatos por parte de la banda se rompió», y que ya no tenía «ni el más mínimo sentido» que hubiese «ningún contacto».
En este contexto, tras recordar que el Ejecutivo ha desmentido sistemáticamente las noticias que apuntan hacia lo contrario, pidió que se crea la versión gubernamental. «Me parece que cuando se desmiente algo por parte de un Gobierno democrático hay que creer al Gobierno, no al entorno de una banda terrorista», comentó.
Cabe destacar que no es la primera vez que desde el Gobierno y desde el PSOE se hacen este tipo de llamamientos que después el tiempo y el conocimiento de los hechos han ido poniendo en su sitio.
Por otra parte, es preciso recordar que, según informó ayer GARA, la ronda de contactos celebrada en una ciudad europea contó con la presencia de cualificados observadores internacionales. Se añadía además que los encuentros de mayo eran continuación de otros que se produjeron anteriormente en los meses de marzo y abril y en los que no hubo avances.
Al PP le cuesta callarse
Ante las informaciones divulgadas por este diario, el portavoz adjunto del PP en el Congreso, Vicente Martínez Pujalte, declaró que «es difícil permanecer callado ante un hecho tan grave». «Es difícil no pedirle al Gobierno explicaciones por ello. Y lo más difícil de todo es tener la sensación de que, nos digan lo que nos digan, no vamos a creer al Gobierno», apostilló.
El portavoz del PP hacía estas afirmaciones en referencia al compromiso de apoyar al Ejecutivo en su estrategia «para la derrota de ETA» adoptado por el presidente de su partido, Mariano Rajoy, tras reunirse el pasado lunes con José Luis Rodríguez Zapatero en la Moncloa.
A la vista de las nuevas informaciones, Martínez Pujalte recordó al Ejecutivo de Zapatero ya había negado en su día los contactos que tuvieron lugar durante el Gobierno de José María Aznar «mientras se ponía en marcha el Pacto Antiterrorista» y que luego, según Pujalte, han sido reconocidos por uno de sus protagonistas, el presidente del PSE, Jesús Eguiguren.
«Nos negaron -continuó- que después de la T-4 hablaran con la banda, y hoy parece que, con observadores internacionales, esos contactos y negociaciones siguieron, obviando que había tres víctimas mortales por las acciones execrables de los asesinos de ETA».
Entre tanto, la AVT volvió a su discurso apocalíptico, calificó los hechos como «una vergüenza» y apuntó que «la sociedad española vive hoy, aniversario de las primeras elecciones democráticas de nuestro país, una de las mayores traiciones de los últimos treinta años». En todo caso, la AVT no cree el proceso esté roto, sino que considera que únicamente está en un «paréntesis» a la espera de un momento más oportuno.
Como ayer informó este diario, la ronda de contactos celebrada en una ciudad europea y ahora negada por Gobierno y PSOE contó con la presencia de cualificados observadores internacionales.
La Audiencia Nacional confirmó ayer la decisión de encarcelar a Arnaldo Otegi, interlocutor de Batasuna en las conversaciones con el PSOE y resto de partidos, adoptada el viernes de la pasada semana después de que el Tribunal Supremo lo condenara a quince meses de prisión, por un delito de ensalzamiento del terrorismo cometido en su intervención en el acto de recuerdo de la muerte de José Miguel Beñarán Ordeñana, Argala, en un atentado reivindicado por el Batallón Vasco Español. De esa forma, la Sección Tercera de la Sala de lo Penal rechazó la solicitud de la defensa que pedía la puesta en libertad de Arnaldo Otegi. La fiscalía sostuvo la demanda de que continuara encarcelado. Contra la decisión del Tribunal Supremo cabe interponer un recurso ante el Tribunal Constitucional y solicitar la suspensión del cumplimiento de la pena mientras se resuelve el caso, pero para ello es necesario conocer los fundamentos de la sentencia condenatoria y, de momento, sólo se se ha hecho público el fallo pero no su argumentación.
GARA