TENIS Torneo de Wimbledon
Federer quiere emular a Borg con su quinto título
El suizo es el principal aspirante al triunfo mientras Henin pretende el grande que falta en su palmarés
GARA | LONDRES
El número uno del mundo, Roger Federer, ganador de las cuatro últimas ediciones, abrirá hoy la pista central de Wimbledon contra el ruso Teimuraz Gabashvili, 85 del mundo.
El suizo busca el que sería su quinto título consecutivo en el torneo londinense -en la línea de Bjorn Borg, que lo consiguió de 1976 a 1980- en una edición, además, que incorpora novedades extra deportivas: el All England Tennis Club empleará un sistema de reparto de premios igualitario entre hombres y mujeres, además de un espectacular sistema de medición, el Hawk Eye (ojo de halcón), para permitir a los jueces decidir las bolas conflictivas.
Sobre el césped londinense, Federer no pierde un partido desde hace cinco años. Aún así, soplan ligeros vientos de cambio. Desde 2003 hasta 2006, el tenista de Basilea venció consecutivamente en Halle, primero, y Wimbledon, después, un ritual que ha marcado cada año la supremacía del suizo en torneos sobre hierba.
Pero este año Federer ha faltado a su cita en Alemania. Pidió disculpas por no acudir, prometió que volvería en 2008 y alegó cansancio físico y mental después de Roland Garros. El helvético continúa sin ganar en París y ya lleva un parcial negativo de 8-4 contra Rafael Nadal.
El propio Nadal se ha sacudido la presión al declarar que no cree que se repita la final del año pasado. «Wimbledon es el Grand Slam que peor se me da», ha asegurado el mallorquín.
Son otros los que creen en las posibilidades del campeón de Roland Garros, como Manolo Santana, el único español hasta la fecha que se llevó el torneo de Wimbledon en 1966.
El alemán Boris Becker, el más joven en proclamarse campeón en estas canchas, declaró que es «sin duda el jugador del año» y que ahora «jugará mejor y con más confianza». Tras haber trabajado el saque y con la confianza que otorga haber vencido a una máquina como Federer tres veces en el 2007, Nadal encabeza la legión de aspirantes a llevarse Wimbledon.
Tanta concentración mediática en los número uno y dos del mundo deja a un puñado de magníficos jugadores con mucho margen de acción.
Andy Roddick, finalista en 2004 y 2005 y vencedor cuatro veces en Queen's, se perfila como la alternativa más clara al suizo y el mallorquín, sin olvidar a los Berdych, Baghdatis y Hewitt y la armada de iberoamericanos como Fernando González y David Nalbandián. Los británicos, un año más, cuentan con escasas posibilidades de disfrutar con sus jugadores y no ven a un tenista de las islas en la pista central desde 1938.
El escocés Andy Murray, revelación de 2006, es la baja de última hora; Alex Bogdanovic no acaba de despuntar y Tim Henman parece haber dejado en el recuerdo sus mejores días.
Sin favoritas claras
Por contra, el cuadro femenino no presenta una clara favorita para alzarse con la bandeja de plata. La valona Justine Henin, número uno del mundo, jamás se ha llevado este torneo, aunque llegó a la final en las ediciones del 2001 y 2006.
Amelie Mauresmo, vencedora el año pasado, tiene tanta confianza que ha declarado que no le importaría probar a jugar cinco sets, en referencia al debate suscitado tras la igualdad en los premios. La trayectoria de Serena y Venus Williams dificulta los pronósticos de cara a esta edición. Entre las dos han vencido en cinco de las últimas siete ediciones. Tal vez por eso, Serena, la menor de las dos, declaró que tanto Venus como ella tratarán de «devolver el trofeo a los EE.UU., donde debe estar».
El premio, mientras tanto, descansa en las vitrinas del exclusivo club, un «templo de atmósfera serena», en palabras del tricampeón Boris Becker.
Federer no pierde un partido sobre la hierba de Londres desde que en 2002 cayera en primera ronda ante el croata Mario Ancic, ausente este año.
Si Nadal logra el título será el primer tenista en hacerse con la victoria en París y en Londres en la misma temporada, desde que Bjorn Borg lo lograra en 1980.