El Polideportivo Santanape de Gernika fue testigo de la segunda jornada del doble duelo entre las selecciones de Euskadi y Cuba. A resultas de los partidos, este doble encuentro ha quedado empatado a dos victorias para cada país. Los hombres de Pablo Laso se volvieron a imponer por 83-71 mientras que las cubanas, todo un cuadro de elite, pasaron por encima de las jugadoras vascas por 46-74.

La selección masculina repitió triunfo en un choque con emoción que los euskaldunes desequilibraron a su favor en un inicio de último cuarto mucho más certero en el lanzamiento que el caribeño. Hay que reconocer que la diferencia entre la selección masculina y femenina de Cuba ha mediatizado en exceso el devenir de los choques.

La primera parte fue parecida a la del partido de Durango. Los cubanos ponían la garra y los vascos la calidad, sobre todo cuando lograban que sus pívots recibieran. Urko Otegi y Joseba Iglesias fueron los encargados de dar las primeras ventajas a la tricolor. Javi Salgado salió de titular y conectó bien con sus postes, algo que hizo mucho daño a los caribeños que no poseían kilos para frenarles.

Parecía que todo iba a parecerse al encuentro de Durango, pero entonces los cubanos comenzaron a anotar desde larga distancia. Ello les otorgó la posibilidad de meterse en el choque y de ponerse por delante. La emoción volvía a estar servida.

Fueron unos minutos -cerca de diez entre el segundo y tercer cuarto- en el que los foráneos manejaron mejor el «tempo» del choque. Euskadi no encontraba el camino a canasta con facilidad y los contragolpes del principio de partido se habían agotado.

Los triples entran al fin

Sin embargo, al fin llegó el momento de los exteriores. Un triple de Salgado, con mirada al cielo y un «¡por fin!» incluído, y dos de Kortaberria, ponían por delante a los de Laso que veían como los cubanos perdían el norte tras la embestida tricolor.

Fueron los mejores momentos de los de Laso. En defensa cortaron la racha rival y en ataque doblaban muy bien balones en segundas y terceras posibilidades. Un par de jugadas levantaron los aplausos de las gradas y pusieron diez arriba, 71-61, a Euskadi en lo que parecía que era definitivo. Algo que se tradujo en los instantes finales con un mate de Otegi que levantó a todos de sus asientos.

De este modo, la selección masculina de Euskadi sigue con su buena racha en sus escasos partidos, después de superar con solvencia a Japón en junio del año pasado.

Paliza de las cubanas

El segundo de los choques entre Euskadi-Cuba en categoría femenina derivó en un encuentro con gran superioridad de la selección cubana.

El primer cuarto marcó el devenir del encuentro entre las selecciones de Euskadi y Cuba y dejó bien a las claras la diferencia de potencial entre un equipo y otro. Un 6-18 de salida encarriló el encuentro para las caribeñas que jugaron los cuarenta minutos sin forzar, pero con gran contundencia: 46-74.

El Polideportivo Santanape de Gernika acogió este primer partido con unas gradas repletas. A Euskadi se le notó la exigencia del día anterior, pesaron las piernas y más cuando el acierto de cara al aro fue bajo.

Sin embargo, las de Luis Ledesma no se fueron del encuentro en ningún momento. Iulene Olabarria, del Atlético San Sebastián, fue la mejor del choque y la que más acertada estuvo de cara al aro. Un par de triples suyos levantaron a las gradas, que se conformaron con la garra de las vascas ante unas cubanas que fueron intratables de principio a fin.