Real Juan Larzabal, Luis Mendiola y Joan María Bonet fueron presentados como los sustitutos de Fuentes, Zamora y Ucín
De la Peña será la presidenta si el Consejo es ratificado mañana
Confirmó el preacuerdo con Coleman, que vendría con un ayudante, e Iriarte por tres años y restó importancia al papel clave de Toshack
Joseba ITURRIA | DONOSTIA
María de la Peña dio la sorpresa al anunciar ayer que será ella la presidenta de la Real Sociedad si el Consejo es ratificado en la Junta Extraordinaria que se celebrará mañana a partir de las once en el Kursaal donostiarra.
La otra gran noticia de la esperada rueda de prensa es que sólo habrá otra baja en el Consejo, la de Iñaki Ucín, que De la Peña explicó en base a «razones únicamente profesionales». Fuentes bien informadas muy cercanas al Consejo trasmitían ayer a GARA que había más consejeros que querían dejarlo, pero que sólo ha podido hacerlo Ucín al no encontrar más sustitutos que Juan Larzabal, donostiarra de 41 años y director general de la división inmobiliaria del Grupo Atusa; Luis Mendiola, legazpiarra de 42 y asesor de un grupo promotor; y Joan María Bonet, donostiarra de 42 y director general de Tecnipesa.
De la Peña mostró su disposición a «aunar diferentes sensibilidades. Me comprometo a un aperturismo, a reunirme y hablar con ellas para buscar entre todos aquel camino que ayude a conseguir los objetivos que todos tenemos en la cabeza. Hablar con personas que pueden aportar a la Real sus visiones y con eso se logrará unidad y tomar decisiones adecuadas». En esa línea se mostró dispuesta a hablar con Miguel Santos.
Todos los recursos para subir
De la Peña además presentó un proyecto deportivo «encaminado a devolver a la Real a Primera División. Los demás objetivos quedan supeditados a éste. Nos comprometemos a que todos los recursos de la Real estén destinados a lograr este objetivo en el menor tiempo posible».
Hubo menos sorpresas en el proyecto deportivo. Toshack, Iriarte y Coleman fueron confirmados como responsables del mismo, aunque se quiso reforzar la figura del director deportivo y quitársela al seleccionador de Gales, pese a ser el impulsor del fichaje de Coleman y Iriarte y de la división del fútbol profesional incluyendo al Sanse, del formativo -que dirigiría Larrañaga en coordinación con Iriarte- como se hizo cuando fue manager con Astiazaran.
De la Peña señaló que Iriarte nunca se sentaría en el banquillo y que en él se «ha depositado la confianza para que dirija el área deportiva profesional. Todas las aportaciones externas para apoyar a este club serán bien recibidas. Aportaciones que pueden ser de Toshack, que no tendrá ninguna relación contractual, o de otras personas».
Iriarte tendrá dedicación exclusiva al puesto de director deportivo cuando cumpla con «tres o cuatro cosas que tiene comprometidas con Gales». Tanto él como Coleman, que vendrá con un ayudante del que la presidenta no sabía su identidad, han llegado a un preacuerdo por tres años supeditado a que el Consejo sea ratificado. Si no, el acuerdo no será efectivo. Lo incomprensible es que el acuerdo con el entrenador tenga tanta duración y no se rompa si no asciende porque es difícil pensar que aguante más de un año si no sube a Primera la Real.
De la Peña dijo que el contrato tiene primas por objetivos y admitió que es elevado: «Este Consejo es consciente de la situación financiera del club, pero la contratación entra dentro de las posibilidades haciendo un esfuerzo porque la figura del entrenador es muy importante».
A modo de filosofía, De la Peña dijo que apuesta por la cantera: «A igualdad de condiciones, los de casa son los que nos valen y queremos formar a la gente de casa para que lleguen al primer equipo y buscamos futbolistas con una seña de identidad. La meta que asignamos es que los de fuera sean los mínimos posibles y marquen la diferencia».
Rescisión de Miguel Etxarri
María de la Peña, que manifestó que no va cobrar de la Real y que compaginará su trabajo de abogada con su responsabilidad de presidenta, confirmó además el acuerdo alcanzado con Miguel Etxarri para poner fin a dieciocho años de trabajo para la Real que no han sido justamente valorados y que en su día se reconocerán obligadamente.
De la Peña señaló que «hemos llegado a un acuerdo con Miguel Etxarri para rescindir su contrato con la Real de mutuo acuerdo. Entendemos que éste era el momento que debía llegar para tomar este acuerdo y tengo que demostrar todo el cariño que este Consejo le tiene y su reconocimiento a dieciocho años de trabajo en la Real deseándole lo mejor para su futuro».
María de la Peña explicó que si el Consejo no es ratificado y la Junta no nombra a nuevos administradores, ellos seguirán en funciones hasta la celebración de unas elecciones, pero que no cabe el nombramiento de una Junta Gestora diferente al Consejo para que dirija al club en ese período como manifestó el presidente de Apars, Miguel Ángel Martínez. No quiso pronunciarse sobre el futuro de Iriarte y Coleman en este supuesto.
Desde Apars se señalaba ayer a GARA que ya conocen la legalidad y que las personas que van a presentar hoy en rueda de prensa serán propuestos como administradores que se encarguen de formar esa especie de Junta Gestora que llevaría adelante un proyecto deportivo encabezado por un entrenador guipuzcoano de primera línea. El movimiento tiene apoyos importantes por detrás de personas y de acciones y si el pequeño accionista se moviliza y vota en contra del Consejo puede haber sorpresa mañana.
Si no es ratificado el Consejo ni tampoco los que van a ser propuestos como alternativa, De la Peña señaló que «el Consejo seguirá en funciones hasta que se produzcan las elecciones. No se puede producir un vacío de poder. Otra cosa es que dentro de esta línea aperturista tendremos que buscar consensos y colaboradores para tomar las decisiones más oportunas».
Espera una Junta respetuosa, negó que controlen tantas acciones como se piensa, recordó que la gran mayoría de los títulos están repartidos entre pequeños accionistas y dijo que respetará su decisión.