Los opositores a la granja porcina de Arrieta desmienten intereses especulativos
GARA |
Los vecinos que se oponen a la instalación de una granja porcina en Arrieta, agrupados en la asociación ciudadana Lekerika Bizirik, han desmentido las declaraciones del promotor de la explotación ganadera, Aitor Aurrekoetxea, que les acusó de «inconfesables intereses constructivos o incluso especulativos».
Los residentes asociados en el colectivo Lekerika Bizirik afirman que en su oposición a la granja porcina que quiere emplazar Aurrekoetxea en Arrieta sólo les mueve la defensa del medio ambiente «y nuestro legítimo derecho a vivir en condiciones saludables para nosotros y nuestros hijos, en ningún caso somos especuladores».
Los opositores señalan que el proyecto presentado en el Consistorio «no cumple los requisitos necesarios según los técnicos» municipales. Tras recordar que Aurrekoetxea, que está de huelga de hambre para poder abrir la explotación porcina, no es residente de Arrieta, explican que el proyecto llega a esta localidad vizcaina después de que sus vecinos de Gamiz-Fika, en concreto los del barrio de Garaioltza (Ibarra) lo rechazasen. Según declaran, a raíz de las quejas «el Ayuntamiento de Gamiz-Fika compró un terreno en Arrieta y se lo permutó al promotor para que así los vecinos de Garaioltza se verían libres de soportar una explotación que podría acarrearles molestias por olores y vertidos».
Desde Lekerika Bizirik recuerdan que la totalidad de los vecinos de los barrios más afectados -89 firmas de adultos de seis barrios de un pueblo de 510 habitantes- ha firmado contra la ubicación de la granja porcina en Arrieta. Además, insisten en que la explotación se situará a 20 ó 30 metros de algunas viviendas y a menos de 100 de otras de Olatxua-Olabarri, Lekerika, Kornabiz, Landaguren, Mendiguren y Basabarru.