La propuesta consistirá en la demanda de «una cuota limitada a unos miles de toneladas» de anchoa que se pescarían durante tres meses y «con controles» para garantizar que no se pone en peligro el caladero, señaló Barnier a la prensa, tras entrevistarse con los profesionales franceses de la pesca.

El ministro francés descartó casi totalmente la posibilidad de llegar a un acuerdo con el Gobierno español, tras las negociaciones infructuosas que mantuvo el pasado miércoles con su homóloga española, Elena Espinosa, y por eso dijo que ahora se dirige a la Comisión Europea, «que debe asumir la responsabilidad» de una decisión que espera para la próxima semana.

«Es muy difícil (un compromiso con Madrid) por razones que tengo dificultad de entender», se quejó, tras haber reconocido que Bruselas «prefería que hubiera un acuerdo» entre los dos estados.

La petición de una reapertura del caladero, que fue cerrado hace un año por la UE ante la gran escasez de peces que ponía en peligro esta especie, se basará en el argumento de que los recursos se han regenerado.

Según precisó el titular francés de Pesca, el comité científico europeo ha calculado que las reservas de anchoa en el Golfo de Bizkaia son de unas 30.000 toneladas, «ampliamente por encima del umbral de viabilidad» de 20.000 toneladas.

Insistió en que los pescadores franceses «están inquietos» y «esperan poder trabajar (...) en condiciones responsables y razonables», como han demostrado hacerlo con los anteriores cierres de la pesquería.

A la reunión con el ministro acudieron los responsables de los comités de pesca de los puertos de La Turballe, Saint Gilles Croix de Vie y Sables d'Olonne, que concentran la práctica totalidad de la flota francesa de la anchoa, así como dos diputados y dos senadores de los departamentos en que están ubicados.Varios barcos de esos puertos se habían posicionado a la entrada del puerto de La Rochelle para eventualmente bloquearlo en función de los resultados del encuentro con Barnier.

Un responsable del Comité de Pesca de Saint Gille Croix de Vie, se mostró satisfecho con las explicaciones que les había dado el ministro de Pesca, aunque no se mostró muy confiado en lograr lo que piden.