El consejero director general del Ente Vasco de la Energía (EVE), José Ignacio Hormaeche, y el director de Estudios y Planificación, José Luis Sáenz de Hormijana, afirmaron que es posible que, tras las subidas de precios de enero y julio de este año, «haya una revisión al alza en octubre en las tarifas del gas».

«Con el precio del petróleo (en 2006 su media fue de 65 euros el barril), las previsiones no son demasiado halagüeñas. Por eso decimos siempre que es importante invertir a largo plazo en cuestiones como las energías renovables y el ahorro energético», señaló Sáenz de Hormijana.

Hormaeche explicó que, teniendo en cuenta a todos los sectores, el consumo de energía en la CAV en 2006 creció un 1,5%, mientras que «el PIB lo hizo en un 4,1%. El PIB ha crecido 8 puntos más que el consumo de energía desde 2000», recalcó.

Sube el consumo industrial

Con este dato quiso destacar que «no estamos reduciendo el consumo de energía a costa de la producción industrial». Frente al descenso del consumo residencial, al que hay que sumar el del sector servicios en un 1,4% y el del primario en un 1%, el consumo industrial subió en un 3,4% y el del transporte, en un 3,7%. «El crecimiento acumulado del consumo energético en el transporte ha sido del 60% en los últimos 10 años», apuntó. Aseguró que la generación eléctrica en Euskadi en 2006 cubrió el 69% de la demanda, que creció un 4,4% con respecto a 2005 debido al «consumo industrial y, en especial, al del sector siderúrgico, responsable de un tercio del consumo eléctrico» en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa.

Para lograr mayores niveles de autosuficiencia, Hormaeche confió en el proyecto de una nueva central de ciclo combinado de gas natural en un punto de Araba aún por decidir. Puntualizó que «la energía renovable aportó en 2006 el 4,4% de la demanda total de Euskadi», cuando el objetivo de la Estrategia Energética Vasca «es alcanzar el 12% en el año 2010». «Teníamos previsto tener mejores cifras en este ámbito a estas alturas. Será difícil lograr ese 12% para 2010», reconoció Hormaeche, quien indicó que «habrá que acelerar y reforzar los proyectos» para intentarlo.

La producción hidroeléctrica se redujo un 24%, mientras que la eólica aumentó un 42%, la fotovoltaica, un 71% y los paneles solares térmicos en un 55%.