La multinacional agroalimentaria Chiquita Brand International ha sido demandada en Estados Unidos bajo la acusación de haber dado apoyo financiero a una organización paramilitar de Colombia para proteger sus negocios en el país. Varias organizaciones presentaron ayer una demanda colectiva en la Corte Federal de Newark, en Nueva Jersey, donde tiene su sede social la multinacional, a la que acusan de ser «cómplice en los casos de asesinatos, ejecuciones, torturas y violaciones de los derechos humanos» cometidos por las Autodefensas Unidas de Colombia, a la que presuntamente entregó dinero.

Los organismos demandantes afirman que Chiquita Brand «financió y armó a conocidas organizaciones terroristas en Colombia con objeto de mantener su control».

«Estos pagos -añade el texto- fueron revisados y aprobados por altos ejecutivos y dieron como resultado el asesinato selectivo de miles de personas, entre ellas, sindicalistas, trabajadores del sector banano y políticos».

Un portavoz de Chiquita Brand negó en un comunicado todas estas imputaciones y dijo que la empresa «fue forzada a realizar pagos tanto a la izquierda como a la derecha paramilitar».