El régimen paquistaní ha tomado las calles y ha procedido a redadas masivas de opositores en vísperas de la anunciada llegada hoy de su exilio en Londres del ex primer ministro Nawaz Sharif, derrocado en 1999 por el actual presidente y general golpista Pervez Musharraf.

Más de 2.000 partidarios de Sharif han sido detenidos en el Punjab en los últimos cuatro días, y otros se han escondido, denunció Ahsan Iqbal, portavoz del partido de Sharif. Funcionarios que pidieron no ser identificados confirmaron unas 700 detenciones.

La Policía ha tomado el control de los aeropuertos, amparándose en un oportuno aviso de EEUU de amenazas de atentados. acrecentado las medidas de seguridad en los principales aeropuertos de Pakistán tras recibir informes acerca de posibles atentados. El Gobierno ha sugerido que Sharif podría ser arrestado y algunos reportes de la prensa sugieren que se estaría preparando una «celda para un personaje importante» en una fortaleza del siglo XVI.

Desde su feudo del Punjab, Sharif se ha aliado con seis formaciones islamistas críticas con el apoyo de Musharraf a EEUU.