Miles de personas se manifestaron ayer por la tarde en Berlín para exigir la salida de Afganistán de las tropas alemanas.

La movilización, convocada por una amplia plataforma que agrupa a 150 comités, asociaciones pacifistas y a la organización internacional de mujeres por la paz, partió de los aledaños del Ayuntamiento berlinés bajo el lema «Detengan el terror de la guerra: La ayuda humanitaria no necesita a los militares».

Los manifestantes utilizaron megáfonos y sonidos para simular el ruido de las bombas, que lo intercalaron con la lectura de textos en varias lenguas y músicas de distintas culturas.

Coincidiendo con esta protesta, que reunió a unas 10.000 personas, la canciller alemana Angela Merkel subrayó en su mensaje semanal que «no hay alternativa al compromiso activo de Alemania» porque, según dijo, «no debe haber ningún Estado en el mundo sin estructuras capaces de impedir el terrorismo».

Estas declaraciones tienen como telón de fondo un nuevo debate sobre la extensión de la misión alemana, que expira el 15 de noviembre, y la ampliación de la misma al sur del país. Actualmente, Alemania tiene 3.000 soldados en Afganistán.