Acuerdan acelerar la eliminación de sustancias nocivas para la capa de ozono
Los representantes de 200 países han decidido en Montreal acelerar en 10 años la eliminación de sustancias nocivas para la capa de ozono. Los promotores de la cumbre han destacado el carácter «histórico» del acuerdo en el marco de la lucha contra el calentamiento climático.
GARA |
190 países más la Unión Europea se han puesto de acuerdo, en el marco de una conferencia en Montreal (Quebec) para primero congelar y luego eliminar antes de lo previsto los HCFC (hidroclorofluorocarbonos), sustancias nocivas para la capa de ozono utilizadas en la refrigeración y en la climatización.
El anfitrión y ministro canadiense de Medio Ambiente, John Baird, y el director del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, Achim Steiner, calificaron el acuerdo de «señal vital» antes de los encuentros previstos de aquí a finales de año sobre el cambio climático, en concreto la cumbre convocada la semana próxima por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
Firmado en 1987, el Protocolo de Montreal, considerado como el acuerdo medioambiental más eficaz de los logrados hasta la fecha, preveía la eliminación de los HCFC en 2030 para los países industrializados y en 2040 para los países en vías de desarrollo.
En virtud del acuerdo alcanzado en la ciudad quebecois tras negociaciones que han durado toda la semana pasada, la producción de estas sustancias será congelada en 2013 a su nivel de 2009-2010, antes de su eliminación total, que ha sido adelantada a 2020 para los países industrializados y a 2030 para los países en vías de desarrollo. Los países enriquecidos se han comprometido a reducir su producción y consumo de estas sustancias un 75% desde 2010 hasta un 90% en 2015. Por lo que toca a los países en vías de desarrollo, han aceptado una reducción del 10% en 2015, que alcanzará un 35% en 2020 y llegará a un 67,7% en el año 2025.
«Si no hubiéramos llegado a un acuerdo, la producción de HCFC se habría doblado de aquí a 2015», señaló Steiner, para añadir que ello habría supuesto lanzar a la atmósfera cientos de miles de millones de toneladas de gas de efecto invernadero.
Según el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, la aceleración en la eliminación de HCFC debería permitir reducir un 3,5% las emisiones de gases de efecto invernadero en el planeta.
Elogios a China
Baird y Steiner saludaron el papel constructivo mostrado por China. Beijing reclamaba una ayuda de compensación para facilitar su transición hacia sustancias menos nocivas para el medio ambiente y su oposición bien podría haber truncado el acuerdo final
Los países donantes se han comprometido a seguir financiando el fondo multilateral para ayudar a los países en vías de desarrollo, pero no han comprometido cifra alguna.
La conferencia de esta semana ha marcado el vigésimo aniversario del Protocolo de Montreal, que ha conseguido prácticamente eliminar una primera generación de sustancias nocivas para la capa de ozono, concretamente los CFC (clorofluorocarbonados). El ozono, una molécula procedente del oxígeno, juega un papel esencial al filtrar los rayos ultravioleta B, responsables en buena medida de los cánceres de piel.
Los científicos apuntan a que la capa de ozono podría, en 2050 o 2060, volver a su situación en 1980, antes de que las grietas en la capa de ozono crecieran y llegaran, en setiembre de 2006, a tener una dimensión récord de 29,5 millones de kilómetros cuadrados.
Siempre según cálculos científicos, sin el Protocolo de Montreal, la población mundial habría contraido alrededor de 100 millones de cánceres de piel más de aquí al año 2020.