GARA > Idatzia > Kirolak

fórmula Uno Gran Premio de Japón

Hamilton acaricia el título bajo el diluvio del Monte Fuji

En una carrera marcada por la lluvia, Alonso abandonó en la vuelta 41 y el británico consiguió acabar el primero para aventajar en 12 puntos al asturiano

GARA | FUJI

Todavía restan dos pruebas para que expire el Campeonato del Mundo de Fórmula Uno de 2007, pero muy mal le deberán ir las cosas a Lewis Hamilton (McLaren Mercedes) para no proclamarse campeón en el año de su debut en la categoría.

El piloto británico fue el gran beneficiado del «diluvio universal» de la carrera del circuito del Monte Fuji, y aventaja en 12 puntos a su más inmediato perseguidor y al mismo tiempo compañero de equipo, el asturiano Fernando Alonso.

El vigente campeón debió abandonar la carrera tras estamparse contra un muro en la vuelta 41. El coche le hizo lo que se denomina «aquaplaning» y, aunque salió ileso del golpe, ya no pudo seguir en carrera. De hecho, el ovetense ya sufrió una salida de pista y un trompo, este último, producto de un toque de Vettel. El McLaren de Alonso tenía, además, serios daños en la parte posterior derecha.

La incesante tormenta que cayó sobre el asfaltó nipón mediatizó hasta el extremo la carrera. De inicio, la prueba estuvo neutralizada por el safety car en las primeras 18 vueltas, por lo que Alonso perdió el «factor sorpresa» con el que atacar a Hamilton. Por su parte, los Ferrari pagaban con diversas salidas de pista su mala elección de neumáticos, con lo que debían entrar a boxes a cambiar de juego de gomas y pasaron a la cola del carrusel de coches.

Cuando al fin se lanzó la carrera, la primera víctima fue Heidfeld, que cayó a la parte trasera de la carrera. Y Wurz se salía, arruinando de paso el morro del monoplaza de Massa.

Cambio de estrategia y errores

El peculiar arranque de la carrera provocó que los coches consumieran la gasolina a menor ritmo, con lo que retrasaron su entrada a repostar. Los McLaren Mercedes tuvieron, además, la feliz idea -visto el resultado- de cargar con mucha gasolina, de modo que les bastara con una única parada.

Sin embargo, este cambio de estrategia afectó de forma diferente a los líderes. Si Hamilton no lograba escaparse de Alonso en la primera parte, a partir del repostaje logró poner asfalto de por medio, mientras que el asturiano comenzaba su «baile» de salidas de pista. Tampoco se libró Lewis Hamilton, que sufrió un trompo tras tocarse con Robert Kubica. Por detrás, los Ferrari y los Renault escalaban posiciones poco a poco.

La visión de McLaren respecto a la estrategia de carrera surtió efecto. Los rivales de Hamilton fueron entrando uno tras otro a cambiar neumáticos y a repostar, mientras que el líder del mundial seguía en la pista. Así, los respiros de Webber, Kovalainen y Fisichella dejaron el camino expedito a Hamilton, al tiempo que Alonso se topaba con su muro de las lamentaciones. La carrera volvió a neutralizarse.

A la vuelta, Hamilton supo mantener a raya a Kovalainen, que bastante tenía con aguantar el ataque de Raikkonen, que debió conformarse con ser tercero. Hamilton lograba su cuarta victoria del año. El Mundial está en sus manos a falta de las pruebas de Shangai e Interlagos.

Según sus intereses

La carrera del Monte Fuji puso en bandeja el título del mundial de pilotos a Lewis Hamilton. La carrera, condicionada por la lluvia, salió según los intereses del británico, mientras que Alonso abandonó por primera vez después de 17 carreras en los puntos.

El británico destaca que «el triunfo se debe al gran esfuerzo realizado por el equipo»

Feliz aunque bastante comedido, el británico Lewis Hamilton quiso compartir su éxito en el Gran Premio de Japón con la escudería McLaren Mercedes, con la clara idea de relajar la tensión que viene enturbiando el ambiente diario en su seno.

«Trabajamos muy bien y todo el equipo realizó un gran esfuerzo para lograr la pole, para estar en lo más alto. De hecho, mi vuelta final ha sido muy buena», comentó.

El actual líder del mundial resaltaba que se encuentra bien en el circuito de Fuji: «Me siento fuerte en este trazado y, obviamente, las condiciones atmosféricas lo ha hecho bastante desafiante, pero el coche ha corrido perfectamente», terminó.

La otra cara de McLaren era Alonso. El asturiano deseaba que lloviera, pero el cielo le dio un regalo envenenado. Resignado, el bicampeón mundial declaraba que «hay que ser realistas. El campeonato está complicado. Necesitaríamos un abandono de Hamilton, ya que sino recortar seis puntos en carreras normales es casi imposible».

GARA

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo