La pareja vizcaina formada por Santi Artetxe y Sandra Fernández se aseguró matemáticamente el título vasco de rallyes, tras conseguir la victoria final en el Rallye de Gernika, con su Peugeot 307 WRC y un tiempo de 39.02.2.

El dueto, que consigue así su tercer entorchado consecutivo, dominó casi por completo la prueba, ya que su pilotaje se impuso en siete de los nueve tramos en que consistió.

La única competencia que tuvieron que superar fue la de Xabier Lujua y Txiki Burgos, que dieron batalla en la parte inicial. Sobre un Skoda Octavia WRC, los también vizcainos se impusieron en los dos primeros tramos, pero un conato de incendio en su motor les obligó a retirarse, lo que dejó vía libre a los posteriores campeones.

La segunda plaza quedó reservada para Ramón y Alazne Apalantza, quienes sobre su Mitsubishi WRC, se mostraron muy regulares durante toda la jornada, pese a quedar a casi minuto y medio de los ganadores. La tercera posición recayó en la pareja formada por Xabier Alustiza y Xabier Altube.

Mención especial para Gorka Antxustegi e Iban Ibarluzea, ya que se apuaron a la cuarta plaza con su pequeño Critröen AX GTI, a la par que encabezan el campeonato junior.

Copa Renault Turbo

En lo que se refiere a la Copa Renault Turbo, el triunfo final correspondió a Igor Zabala e Ignacio Fondado, sobre su Renault 11 Turbo, con minuto y medio de margen sobre Adur Alberdi, siendo el tercero en discordia Roberto Alonso.

El Rally de Gernika se caracterizó por su gran dureza, ya que durante el desarrollo de la prueba se contabilizaron nada menos que 27 abandonos, provocados por diversas salidas de carretera y averías mecánicas.