Grecia pide restituir los frisos del Partenón al inicio del traslado de reliquias al Nuevo Museo
Grecia aprovechó el traslado de las primeras reliquias de la Acrópolis de Atenas al Nuevo Museo para exigir como «un deber a la civilización» la restitución de los frisos que desde hace dos siglos se hallan en Londres.
Adriana FLORES-BÓRQUEZ | ATENAS
«El nuevo recinto protege y muestra las reliquias del Partenón de la mejor manera, lo que insta a renovar la petición mundial para la reunificación de los frisos», cuya mayor parte se encuentra en Gran Bretaña desde principios del siglo XIX, manifestó el ministro de Cultura griego, Mijalis Liapis.
Después de una llovizna y de vientos al límite de la seguridad, el primer cajón metálico de color azul, llevando parte de un friso de 2,3 toneladas del templo del Partenón, fue desplazado por una de las tres gigantescas grúas instaladas a ese efecto hacia el Nuevo Museo de la Acrópolis, a 300 metros de distancia.
El ministro, arqueólogos, ingenieros y técnicos junto a un centenar de personalidades, incluido el embajador británico en Atenas, asistieron al primer día del transporte de más de 300 estatuas, frisos y bloques esculpidos del Partenón y del resto de los monumentos de la Acrópolis de Atenas, un símbolo de la civilización occidental que recibe unos dos millones de visitantes al año.
Desde el tercer piso del Nuevo Museo y tras comprobar que el bajo relieve del friso norte del Partenón había hecho el trayecto de 300 metros sin percances, Liapis resaltó «el significado histórico y la proyección mundial» del traslado tras 25 siglos al nuevo museo, «uno de los más modernos del mundo».
Con él coincidió Costas Tzambas, ingeniero jefe del proyecto del transporte de más 20 cajas especiales que llevarán un total de 300 toneladas de vestigios en una operación que cuesta 1,6 millones de euros y que se espera que finalice en tres meses.
«El sueño de Melina Mercuri»
«Grecia envía un mensaje al Museo Británico de que el conjunto de las reliquias de la Acrópolis deben de ser exhibidas en el Nuevo Museo y tengo la certeza de que no estamos muy lejos de que se cumpla el sueño de Melina Mercuri», dijo Tzambas.
Según recordó Tzambas, la fallecida actriz Mercuri, ex ministra de Cultura griega, inició en la década de los años 80 una campaña mundial para el regreso de los frisos del Partenón. «Éstos fueron llevados al Reino Unido en 1801 por Thomas Bruce, séptimo conde de Elgin, quien fue embajador británico en el Imperio Otomano, que entonces incluía a Grecia», indicó.
Tzambas se mostró «muy satisfecho» por el modo en que transcurrió ayer el transporte de las reliquias, «porque se ha logrado con pleno éxito y hemos trabajado como un reloj».
Las reliquias han sido aseguradas por un valor de 400 millones de euros.
Bernard Tschumi, el arquitecto suizo-estadounidense que ganó el concurso para construir el Nuevo Museo después de décadas de retrasos, también mostró su satisfacción después de que muchos vaticinaran que no sería inaugurado nunca -cuando no abrió para los Juegos Olímpicos en 2004-. «Está bien hecho y listo para albergar las esculturas», resaltó.
Para Dimitris Pandermalis, director del Nuevo Museo de la Acrópolis, «se trata de un día lleno de alegría en el que se trasladan las reliquias de la Acrópolis a un hogar mucho mejor y por primera vez se exhibirán en la forma que se lo merecen. Por eso estamos orgullosos».
El director del Museo Benakis de Atenas, Angelos Delivorias, comentó emocionado que «la historia de la construcción del nuevo museo se ha prolongado por una generación entera, por 30 años», por lo que tras esos esfuerzos «es un día de gran alegría para todos». Por su parte, Grigoris Camilos, jefe de la gestión y coordinación de las grúas implicadas en el traslado, calificó como «difícil» el proceso y dijo que «no nos atrevíamos a pensar que algo saliera mal».