GLASGOW RANGERS 0

F.C. BARCELONA 0

Escocia nunca ha sido una plaza especialmente propicia para el Barcelona. Ayer, el conjunto blaugrana volvió a acreditar sus problemas para vencer en dicho país. Los catalanes se presentaron en Ibrox Park con las novedades de Thuram y Gudjohnsen en el once. El lateral galo ocupó el carril derecho, mientras que el islandés, al igual que hiciera con acierto en El Madrigal, actuó como sustituto del lesionado Deco en la medular.

Así, durante la primera mitad, Gudjohnsen se convirtió en uno de los jugadores más activos, dinámicos y verticales de un Barcelona que dominó el juego. Tanto, que poco a poco fue acogotando al equipo de Walter Smith. De hecho, al Rangers no le quedó otro remedio que defender con uñas y dientes el empate a cero. Gracias a ello, quitando una falta de Ronaldinho que sacaron entre McGregor y el larguero, los de Fran Rijkaard no pudieron perforar la meta del equipo escocés.

Los culés amagaban una y otra vez, daban la sensación de que podían abrir la lata sin problemas, pero se quedaron en un errático medio camino. Impresión que se acrecentó en la segunda mitad, donde el Rangers estuvo mejor físicamente y tuvo sus pequeñas opciones.

En los segundos 45 minutos, el balón volvió a ser de un Barça ciertamente acomodado, tanto que los escoceses fueron quitándose miedos y vieron la posibilidad de intentar salir tímidamente al ataque. Una situación que era jaleada por una afición que percibe un córner a favor como si de medio gol se tratase. De una de ellas precisamente llego su ocasión más clara. El galo Cousin tuvo la ocasión de certificar una histórica victoria en sus botas, pero su empalme se marchó fuera por poco.

El partido languideció y un timorato Barcelona recuperó la pelota, pero optó por no arriesgar con el objetivo de no perder un punto que sabía a gloria a su rival. Tanto, que nada más pitar el colegiado el final, la hinchada de local celebró el triunfo como si de una victoria épica se hubiera tratado. Ahora, culés y escoceses tienen todo en la mano para pasar a la segunda fase. Todo, dentro de un grupo en el que el Olympique de Lyon dejó muy tocado a un Stuttgart sumido en una profunda crisis.

El Arsenal hace un siete

La jornada quedó marcada por la goleada impresionante del Arsenal al Slavia de Praga. Los gunners practicaron un juego espectacular¯con Fábregas al mando¯ y destrozaron al equipo checo. Las ocasiones se sucedieron y los goles también. Así, Walcott y el catalán hicieron dos, mientras que Hleb, Bendtner y Hubacek¯en propia puerta¯anotaron uno. Tal fue el baño del equipo inglés, que los jugadores del Slavia terminaron el partido de cuclillas frente a su afición. Los hinchas supieron reconocer ese gesto y despidieron a su equipo con una ovación que limpiaba su imagen, pero no sus pecados.

Por lo demás, la calidad del United volvió a hacer acto de presencia en Kiev. El equipo de Sir Alex Ferguson venció por 2 a 4 en Ucrania, merced a los tantos anotados por Rooney, Ferdinand y Cristiano Ronaldo en dos ocasiones. Además de los reds, Sevilla, Inter y Roma también ganaron sus choques.