El Consejo de Seguridad de la ONU instó ayer a Marruecos y al Frente Polisario a seguir «negociando bajo los auspicios del secretario general sin condiciones previas y con buena fe, teniendo en cuenta los esfuerzos logrados desde 2006 y los acontecimientos de los últimos meses».

Asimismo, amplía hasta el 20 de abril de 2008 el mandato de la Misión para el Referéndum en el Sahara Occidental.

El contenido de la resolución fue objeto de un intenso debate en el seno del Consejo después de que Sudáfrica denunciara los intentos del Estado francés y Estados Unidos de incluir una recomendación favorable a Marruecos. Mientras que Rabat sólo da por bueno su plan de autonomía, el Frente Polisario reclama el derecho de autodeterminación y la realización de un referéndum que incluya la opción de la independencia. Aunque el texto final menciona ambas posturas, a instancias del Estado francés, EEUU, Gran Bretaña y Rusia, «acoge con beneplácito los esfuerzos serios y creíbles de Marruecos para hacer avanzar el proceso hacia una resolución».

Críticas de Sudáfrica

Estas palabras causaron la protesta de Sudáfrica. «Cualquier intento de colocar una propuesta por encima de otra socava las negociaciones», destacó el embajador sudafricano, Dumisani Kumalo.

También deploró que no mencionara la obligación de respetar los derechos humanos después de que el informe de Ban se hiciera eco de las denuncias contra las autoridades marroquíes por parte de los saharauis.

«Este Consejo es muy ruidoso a la hora de hablar de los derechos humanos en otros lugares, pero se mantiene silencioso cuando se trata de los derehos del pueblo del Sahara. Por estas cosas pierde credibilidad».

El Frente Polisario celebró el resultado de esta votación al considerar que había derrotado una «maniobra marroquí», en alusión a la autonomía.