El bloque de derecha del primer ministro liberal, Anders Fogh Rasmussen, ganó ayer las elecciones en Dinamarca con el 48,7% de los votos, según un sondeo de la televisión pública. Rasmussen y sus aliados, los conservadores y el ultraderechista Dansk Folkeparti, obtendrían un escaño menos y se quedarían a cuatro de la mayoría absoluta, que lograrían, sin embargo, con los cinco escaños del centrista Ny Alliance.

La oposición de izquierda, a la que se atribuye el 47,2%, se quedaría en 84 escaños, tres más que en los anteriores comicios.

El Partido Socialista Popular (Socialistisk Folkeparti) doblaría sus votos hasta el 12,8%, el Radical Liberal perdería 3,3 puntos hasta el 5,9% y coalición roja y verde Lista Única retrocedería 0,8 hasta el 2,6% de los votos.