Superado el bache que le mantuvo tres jornadas a palo seco, el Eibar espera ahora remontar también el vuelo como visitante, una faceta en la que ya destacó en los primeros compases de la temporada.

Buenas sensaciones, como las experimentas en Ferrol, Vigo, Cádiz o incluso Málaga, que han brillado por su ausencia en los últimos desplazamientos. Pero como no todo tiempo pasado fue mejor, hay otras sensaciones que los azulgranas prefieren no recordar. Concretamente las que se refieren a Castalia, donde el Eibar no ha conseguido la victoria en ninguna de sus cinco visitas anteriores.

Puede ser un buen momento para acabar con esta particular maldición. El buen juego y los tres puntos del pasado sábado hacen que los armeros afronten el encuentro en mejores condiciones que su rival. Un Castellón con un punto menos que el Eibar, que acumula dos jornadas consecutivas sin ganar y al que, como a todos los equipos con aspiraciones, la zona media de la clasificación le incomoda. Tranquilidad frente a presión, por tanto, aunque no se trate, lamentablemente, de una ecuación matemática.

Sin vergüenzas

Tampoco aseguran nada las buenas sensaciones, aunque seguro que ayudan y en este caso, Javier Mandiola deja claro que los suyos las tienen. «Siempre puede pasar lo de Mendizorrotza, pero no tenemos esa sensación, y mucho menos la intención -aseguró ayer el técnico-. Vamos con la intención de ofrecer nuestro mejor nivel y así tendremos más posibilidades de volver con algo positivo».

Teniendo en cuenta el estilo de juego del Castellón, Manix también considera que su equipo tiene que «ir a ganar, aunque nos pueda valer con un punto».

De ahí que no quiera «vergüenzas», para un partido al que hay que salir con descaro. Pero tampoco, si hiciera falta como el pasado sábado, para «poner el autobús. Además, sería buena señal, porque querría decir que antes hemos conseguido algo bueno que queremos mantener», aseguró.

Pepe Moré, por su parte, pide a su equipo que sepa «llevar bien el partido, a base de paciencia y personalidad, y también con la tranquilidad suficiente como para pensar que un encuentro se puede ganar desde el primer hasta el último minuto».

En lo que respecta a su rival, el técnico catalán espera a un Eibar que «juega bien al fútbol. Mandiola sabe sacar el máximo rendimiento a cada futbolista y este equipo sabe tocar bien el balón, a pesar de hacer el típico fútbol vasco», analizó.

Dos cambios

Habrá que esperar, por otra parte, a comprobar si Manix mantiene el once que se impuso al Córdoba o si, teniendo en cuenta que le gusta jugar al despiste, introduce los dos cambios que adelantó ayer.

Dos novedades que, en caso de producirse, podrían pasar por la titularidad de Nico Medina y Xabi Eizagirre. El primero podría entrar en punta de ataque, en detrimento de Asier Goiria, mientras el mutrikuarra, con el que Manix realizó ayer algunos ensayos, podría sustituir a Joseba Del Olmo. En ambos casos, supondría su estreno en el once titular.