Diez personas, entre ellas seis niños y un militar italiano, murieron y otras doce resultaron heridas en un ataque suicida contra miembros del contingente italiano en las afueras de Kabul, informaron fuentes oficiales.

El atentado tuvo lugar en el distrito de Paghman, en la periferia de la capital afgana, cuando el agresor hizo estallar los explosivos que llevaba consigo cerca del lugar en el que soldados italianos inspeccionaban un puente recién construido.

La explosión acabó con la vida de un soldado italiano y nueve civiles afganos, entre ellos seis niños, mientras que otros tres militares italianos y nueve civiles más resultaron heridos.

Un segundo atentado tuvo como objetivo a soldados estadounidenses en el distrito de Gorboz, en la provincia de Khost, sin que se produjeran víctimas.

Ambos ataques fueron asumidos por los talibán mediante una llamada telefónica realizada a la agencia France Presse.

Por otro lado, el gobernador de la provincia de Farah, Mohaiyudin Baluch, anunció que las fuerzas de seguridad del país recuperaron el distrito de Gulistán, que habían tomado recientemente los talibán por segunda vez en un mes.