ELCHE 2  DEPORTIVO ALAVÉS 2

Jon Ormazabal

Los mismos errores en defensa de siempre impidieron que el mejor Alavés a domicilio de la temporada lograra esa victoria que le permita librarse de la presión que le obliga a afrontar como finales todos los partidos a jugar en Mendizorrotza. Pese a que a priori el empate ante un Elche muy fuerte en casa pudiera darse como un buen resultado, la forma en la que se desarrollaron los acontecimientos dejaron un sabor muy amargo en la expedición albiazul.

Y es que el punto obtenido en el Martínez Valero se antoja muy escaso para la superioridad que los gasteiztarras tuvieron ayer sobre un Elche que se vio superado por los albiazules pero que pudo salvar un punto en el minuto 85 gracias a la falta de contundencia en un despeje por parte de la defensa visitante, cuando ya asumía su derrota.

Porque del partido de ayer se puede decir que al Alavés sólo le sobraron los dos errores que dieron pie a los goles locales, en todo lo demás fue superior, pero estos fallos se están cobrando una factura demasiado cara para los albiazules.

Por contra, la lectura positiva del partido debe ser que el Alavés parece haber encontrado el camino fuera de casa. Los errores, los detalles, han hecho que sólo sea uno el punto obtenido entre El Ejido y Elche, pero la puesta en escena ha sido buena.

Rápida ventaja

El partido de Elche comenzó de la mejor manera posible, ya que el Alavés apenas necesitó un minuto para que Toni Moral, el mejor, provocara un penalti. Raúl Sánchez tomó la responsabilidad y ejecutó perfectamente la pena máxima.

Los planteamientos iniciales de ambos entrenadores beneficiaron a los albiazules, ya que Vidal apostó por dos puntas muy similares y el Alavés dispuso de una superioridad numérica en el centro del campo que le permitió ser muy superior.

Sin embargo, un error a la hora de tirar el fuera de juego permitió a Miguel plantarse solo ante Bernardo y batirle con una gran vaselina justo después de que Raúl Sánchez perdonara en un cabezazo a placer.

No menos clara fue la opción que tuvo Mateo poco después de encajar el empate y su remate también salió alto. Con un gran Toni Moral y un veloz Gabri, el equipo de Uribe hizo daño por bandas pero le faltó dar la puntilla a un rival superado.

Sergio, muy suelto, mantuvo la línea de incorporarse desde segunda línea y, tras dos sustos en los que Bernardo se lució, el Alavés volvió a tomar el mando, con incluso grandes jugadas como la que dio pie al segundo gol de los babazorros. Tras una gran jugada colectiva, Toni Moral puso un centro desde la izquierda que Gabri remató completamente solo en el segundo poste.

Los intentos de Vidal por cambiar la dinámica desde el banquillo resultaron baldíos y los gasteiztarras tuvieron incluso una gran oportunidad de sentenciar, cuando Toni Moral le robó la cartera a Fernando Niño y se plantó solo ante Caballero, pero no supo batirle.

Los cambios de Uribe no sirvieron para dormir el partido, el Elche siguió creyendo en el empate pese a su falta de argumentos y encontró el punto que no mereció en un balón suelto con el que Martí empató en el 85.