Más de un centenar de militares fueron detenidos en el Hotel Península, en Makati, distrito financiero de Manila, acusados de participar en el motín del jueves contra la presidenta filipina Gloria Macapagal.

El jefe de la Policía Nacional, Avelino Razón, dijo que están buscando a más personas y que han encontrado varios documentos que «apoyan la idea de que ésta fue una actividad bien planeada». «Hay otros componentes y estamos buscando a otros grupos que podrían intentar seguir con la implementación de sus planes», añadió.

Además, 872 personas fueron detenidas en Manila durante el toque de queda de cinco horas declarado por el Gobierno. Razón explicó que la mayoría son menores de edad sin techo o que desconocían el toque de queda. «Hemos tenido una noche pacífica. No se produjeron incidentes adversos durante el toque de queda y retuvimos a los 872 durante ese periodo», manifestó. Según indicó, todos ellos fueron puestos en libertad al término del toque de queda.

Por otra parte, unas 5.000 personas salieron ayer a las calles de Manila para exigir la dimisión de Macapagal.