El joven de Durango Gorka Lupiañez se encuentra incomunicado a manos de la Guardia Civil, tras su detención por parte del instituto militar en la tarde-noche del jueves. El Ministerio del Interior español no dio ayer casi ninguna información sobre el detenido, que estaría en La Salve, y se limitó a dar cuenta del arresto, al parecer, en un control de la Guardia Civil en Berriz, cuando se desplazaba a pie, así como a anunciar el desarrollo de una operación policial que aún permanecería abierta.

Fuentes policiales citadas por las agencias, relacionaron a Lupiañez con ETA, y aseguraron que en el momento de su detención portaba documentación falsa y se hallaba armado.

El joven durangarra, al parecer, se encontraba en situación de libertad provisional y estaba previsto que fuera juzgado en enero bajo la acusación de participar en varios actos de sabotaje. Por este mismo motivo, ya había sido detenido en anteriores ocasiones, aunque había resultado absuelto.

A este respecto, Askatasuna recordó que el joven «ha sido detenido en dos ocasiones hasta ahora, y en ambas ha sido torturado», al tiempo que censuró el hecho de que esta última detención «ha sido ocultada», de forma que han sido los medios quienes han dado cuenta de la misma. Mañana, representantes del organismo antirrepresivo y familiares de Lupiañez comparecerán en Durango para hacer una valoración de los hechos.

A diferencia de lo que sucede en otras ocasiones, durante toda la jornada no trascendió casi ningún dato sobre esta operación policial, aunque fuentes jurídicas citadas por las agencias indicaron que el joven podría pasar a disposición judicial la próxima semana, acusado de un «delito de integración en organización terrorista».

Nada más conocerse la detención se convocó una manifestación de protesta en Durango, que reunió a cientos de personas en la tarde de ayer.

Imputación de la Fiscalía

También permanecen incomunicados, en este caso en París, Asier Bengoa y Saioa Sánchez, detenidos el miércoles en la localidad de Chateauneuf-de-Randon, a quienes la Fiscalía francesa ha decidido imputar oficialmente el haber participado en el tiroteo que hace una semana se produjo en Capbreton, y que se saldó con la muerte de dos agentes de la Guardia Civil.

El Ministerio Público francés, que el jueves apeló a la «prudencia» al relacionar a los detenidos con aquellos hechos, y reconoció que la pistolas que portaban cuando fueron detenidos no fueron utilizadas en Capbreton, decidió ayer acusarles de participar en el tiroteo.

En protesta por las detenciones, 80 personas se movilizaron en Berango, localidad de Saioa Sánchez, y hoy hay una nueva convocatoria a las 20.00. En Gasteiz, de donde es Asier Bengoa, 700 de personas se manifestaron en apoyo a los dos detenidos, así como a Gorka Lupiañez, con presencia de la Ertzaintza y momentos de tensión.