El comité de Michelin-Lasarte firmó ayer el Plan de Mejora de la Competitividad de esta empresa, que finalmente eliminó los traslados definitivos obligatorios a la factoría de Gasteiz. Según informó el delegado de LAB, Jon Landa, tras la mejora de la oferta de la empresa el plan ha sido aceptado por el comité con los votos a favor de CCOO, ESK y CSI, mientras que ELA y UGT se abstuvieron y LAB se opuso.

El plan incluye la desaparición de 550 puestos de trabajo a través de prejubilaciones, bajas incentivadas y traslados, pero se ha eliminado la intención inicial de la dirección de reubicar forzosamente en Gasteiz a 71 empleados. La empresa había reducido a 11 estos traslados forzosos la semana pasada, pero finalmente la negociación se ha resuelto con la eliminación de los traslados definitivos obligatorios, aunque sí podrá haber un máximo de 78 reubicaciones temporales que afectan a personal eventual, según indicó Landa. La reducción de plantilla de Michelin-Lasarte se debe a que la multinacional quiere especializarla en la producción de neumáticos para motocicletas de alta gama, y eliminar la fabricación de ruedas para turismos, que se centrará en la planta de la capital alavesa.

Landa indicó que LAB se ha opuesto al plan de Michelin porque deja «el futuro de la fábrica en entredicho» al eliminar dos importantes líneas de producción.