Se define a sí misma como un «animal de carretera», quizá porque pasó la última década del siglo XX recorriendo pequeñas salas de conciertos donde casi nadie sabía quién era y donde había que acallar el fuerte ruido ambiental con algo más que clase. Dayna Kurtz lo conseguía sin demasiados problemas. Todo era cuestión de comenzar a deshilar el country-folk bañando de tenue jazz para que los bebedores y despistados prestaran atención. Conquistado el local, tomaba de nuevo su coche de segunda mano y lo ponía en dirección al siguiente pueblo. Hoy es comparada con nombres de homogeneidad tan dispar como Billie Holiday, Betty Carter, Nina Simone, Tom Waits, Marianne Faithfull o vagas insinuaciones letrísticas a Suzanne Vega, Leonard Cohen, Jeff Buckley... Distruta con Dayna este próximo miercoles 19 en Kafe Antzokia de Bilbo.