Cada edad tiene su referencia. Eso se lo saben de memoria. No les van a servir esas leyes que fulminan a los de 18 años por expresar su indignación en la calle y van a tener que sacar otras nuevas para condenar a los jubilados que luchan por la independencia de Nafarroa. Intuyen que los padres defenderán la casa de los hijos. Semearen etxea. Castigan con dureza la vida de la juventud comprometida y ofrecen ruina y cárcel para los viejos luchadores . Skinner. Quieren de nuevo la rendición incondicional, como los franquistas, y reprimen con un palo cada vez más irracional las ansias de libertad de un pueblo. Triste objetivo democrático francespañol aplaudido por el sistema y sus monaguillos. A veces, con el cansancio, se mira hacia atrás buscando el relevo en la lucha por la independencia, por las herrikos, por los prisioneros, por el euskera, por lo que supone «Egin», por el pueblo. Salirse de la Korrika. Elkoro les molesta por su coherencia, su militancia comprometida y su hombría de bien en el sentido de la moral aristotélica. Por eso es un referente para muchos otros, cercanos al último tranvía, cuando le ves siempre en la resistencia, junto al que lleva el testigo, incombustible, infundiendo optimismo a pesar de la zurra, la lluvia de palos constante que sobre él y su familia ha caído. Mila esker, Jose Luis, por tu lucha por la libertad de Euskal Herria.