El portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados, Josu Erkoreka, quiso aprovechar el último pleno de control al Gobierno de esta legislatura, para preguntar al presidente por su «proyecto de convivencia para los ciudadanos del Estado español de identidad nacional distinta a la española».

A buen seguro, el diputado jeltzale había previsto varias respuestas de José Luis Rodríguez Zapatero, pero no que le saliera con una cita de Josu Jon Imaz. «Creo en una Euskadi en la que los diferentes sentimientos de pertenencia de quienes componemos la sociedad vasca convivan compartiendo un proyecto de país», dijo repitiendo del ex prsidente del EBB.

Y después, el presidente español añadió que «he citado a Imaz porque comparto sus ideas y para que no se les olvide a ustedes», le dijo Zapatero a Erkoreka.

Zapatero apuntó que, como Imaz, cree «en una Euskadi en la que la voluntad democrática de los ciudadanos sea la base de la mutua convivencia y en la que los acuerdos amplios entre diferentes sirvan para hacer frente a los retos de futuro».

El jefe del Ejecutivo español señaló que «la mejor convivencia democrática es el respeto a la pluralidad de identidades allí donde se produce ,como es Euskadi» y abogó por «acuerdos amplios entre los que no piensan y sienten la misma identidad como la garantía para unos y otros y la garantía para libertad y la democracia».

Zapatero dijo que espera que ese proyecto sea compartido por el PNV y que «sirve para Euskadi y para el conjunto de España».

Josu Erkoreka respondió que ya sabía lo que pensaba Josu Jon Imaz, pero que lo que quería conocer era el proyecto de Rodríguez Zapatero, que seguía sin quedarle claro. En cualquier caso dijo que el PNV seguirá defendiendo las aspiraciones «de la mayoría de los vascos, que incluyen el pleno reconocimiento de Euskadi como nación».

Mariano Rajoy puso el punto de sorna a este debate, preguntándose si Zapatero «se habrá vuelto nacionalista vasco» y proponiendo a Erkoreka que incorporen al presidente del Gobierno al PNV.