Las primeras kalejiras de Olentzeros completaron su recorrido yer en un total de cuatro barrios de Iruñea. Dos de estas fiestas populares tuvieron lugar en Iturrama y Mendillorri, barrios que habían abonado previamente las cantidades exigidas por el Gobierno municipal dirigido por UPN, al igual que años atrás, pero tampoco hubo obstáculos para celebrarlos en Arrosadia y Etxabakoitz, barrios que no habían realizado el pago. En ambos puntos, eso sí, la Policía Municipal se personó al inicio, por lo que habrá que ver si posteriormente se tramita algún tipo de sanción, como otros años.

Concretamente, en Arrosadia, agentes municipales hicieron actos de presencia cuando se procedía a montar la caravana con los tractores. Los policías manifestaron a los presentes que sin permiso no podían salir, ante lo cual se les mostró la autorización solicitada la víspera por las Coordinadoras Culturales, así como el acuerdo plenario por el que se aprobó una moción que exigía la retirada de las citadas fianzas, en el pleno celebrado el viernes.

Miembros de las Coordinadoras Culturales de los barrios habían presentado la víspera en el Ayuntamiento de Iruñea la solicitud de autorización para la celebración de las kalejiras. En la instancia se incorporó el seguro civil obligatorio para la celebración de estos eventos, junto al referido acuerdo plenario.

Los agentes tomaron nota de las matrículas de los tractores que iban a participar en la kalejira antes de retirarse y la fiesta popular se celebró en el barrio sin mayores contratiempos.

No había responsable

Por otra parte, en Etxabakoitz, los policías municipales se presentaron antes de que diera comienzo la fiesta y kalejira organizadas con motivo del Olen- tzero, solicitando la presencia del responsable del acto. No estaba nada claro si la kalejira iba a poder celebrarse ya que, tal y como había manifestado durante la semana la concejala de Movilidad y Seguridad Ciudadana, Ana Elizalde, las fianzas no iban a suprimirse y en en este barrio se había decidido no abonarla.

Al explicárseles que el responsable de la kalejira no se encontraba allí, los agentes abandonaron el lugar y también en este caso el desfile se desarrolló con normalidad. Pese a que la fiesta del Olentzero pudo llevarse a la calle con normalidad en estos barrios y no se repitieron las escenas de «identificaciones» al igual que en años precedentes, quedá por saber que ocurrirá en los próximos días.