Arantxa MANTEROLA

Fue el diputado socialista y presidente del Consejo General de las Landas, Henri Emmanuelli, quien en octubre pasado anunciaba la instalación de una nueva empresa, la sociedad italiana Beltrame, en el recinto del puerto de Baiona aunque en terrenos pertenecientes al departamento limítrofe de las Landas. Emmanuelli aseguraba al mismo tiempo, que la ya existente en Bokale-Tarnos ADA (Aciéries de l'Atlantique) proyectaba una importante ampliación de sus instalaciones. La empresa, que en mayo pasado fue adquirida por el grupo catalán Celsa al gallego Añón, estaría dispuesta a invertir varios cientos de millones de euros para construir dos nuevas unidades de laminados.

Los responsables de la Cámara de Comercio e Industria (CCI) responsable de la gestión del puerto se mostraron entonces cautelosos sobre el anuncio. El director de la CCI Bernard Darretche llegó, incluso, a recomendar prudencia y discreción ya que «se trataba sólo de proyectos» y no había nada concluyente.

Cuatro meses más tarde ha sido la propia Cámara, a través de su presidente Jean-Marie Berckmans, quien ha publicitado oficialmente la noticia: La sociedad Beltrame instalará en Tarnos una planta de laminación e invertirá 50 millones de euros. Además, ADA ha mostrado por escrito su intención de construir dos nuevas plantas de laminados -uno en frío y otro en caliente- más otra unidad de producción de acero plano en forma de bobinas que sería transformada en la misma fábrica. El proyecto supondría una inversión de 500 millones de euros, 400 empleos suplementarios y 700.000 toneladas más de tráfico portuario, o sea, un goloso bocado para el puerto y, de rebote, para su concesonario, la CCI.

No es tan seguro

Sin embargo, aunque Berckmans lo haya anunciado como algo muy probable, lo cierto es que el proyecto de esta última instalación está todavía muy inmaduro. El director de ADA ha matizado a GARA la inminencia de la misma porque, si bien la intencionalidad existe, las necesidades de terreno (30 hectáreas) y, en particular, un andén de 150 metros en el muelle, son fundamentales para tal instalación. «Para nosotros se trata de una cuestión primordial tanto a nivel logístico como para aminorar el impacto medioambiental y evitar las idas y venidas de camiones. Necesitamos acceso directo al muelle para los nuevos talleres y ahí está el problema porque, aunque trabajemos en el mismo sector (siderurgia) y no seamos competencia, los Ets. Beltrame requieren también un terreno y, al parecer, no hay tanto con acceso a muelle para las dos empresas» ha declarado Iñaki Arberas.

El anuncio de estas dos nuevas instalaciones industriales no sólo favorece al desarrollo del tejido industrial y, por ende, a la economía de Lapurdi. No cabe duda de que la propia CCI sabrá sacarle partido en las próximas semanas. Y es que, la concesión por la que la gestión del puerto recae sobre la Cámara acaba a finales de 2008.

Dos candidatos

Hace un mes, el Consejo Regional de Aquitania, propietario del puerto, dio a conocer la existencia de dos postulantes para optar a la gestión del puerto durante los próximos quince años: la Compagnie d'exploitation des Ports (CEP), filial a más del 99% del grupo Véolia y la propia CCI.

Darretche reconocía entonces que «se trata de un adversario de peso» pero se mostraba confiado respecto a los recursos y potencialidades de la Cámara. El balance de lo realizado durante los últimos años, en particular en lo concerniente a la mejora de las infraestructuras en las que ha invertido cerca de 120 millones de euros en los últimos diez años, el aumento evidente del tráfico y la triple certificación de calidad, servicio y medioambiente obtenida en 2006, son para el director de la CCI factores que jugarán sin duda alguna a su favor.

Queda por saber el contenido de la oferta que presentará la CEP-Véolia, un gigante que interviene en campos tan diversos como el de la gestión del agua, de los residuos, del transporte y, cómo no, también en la gestión de varios puertos. Los dos candidatos tienen ahora tres meses para presentar el dossier de candidaturas en base al pliego de condiciones establecido por el Consejo de Aquitania que dará a conocer su decisión, posiblemente, hacia junio. Mientras tanto, también en el puerto, los candidatos estarán en campaña.