Se multiplican las preguntas en torno al fraude millonario en SG
Días después de conocerse el mayor desfalco financiero de la historia ocurrido en el seno de Société Générale (SG) se multiplican los interrogantes sobre las circunstancias que han podido provocar un fraude de 4.900 millones de euros cometido, según señala el banco, por un solo hombre que no ocupaba un puesto relevante durante todo un año.
GARA |
Economistas, expertos en informática financiera y analistas bursátiles intentan ahora resolver algunas incógnitas que rodean el caso de Société Générale, segundo de los grandes bancos del Estado francés. Entre ellas, cómo fue posible tal malversación, cómo se descubrió, cómo ha gestionado la crisis el banco, qué riesgos corre ahora Société Générale, si deben tener miedo los clientes o qué vínculo hay entre el fraude y la crisis de los créditos basura en Estados Unidos.
De hecho, algunas voces no han desechado la hipótesis de que el anuncio del monumental timo haya servido de parapeto para relegar a un segundo plano los más de 2.000 millones que Société Générale ha perdido como consecuencia de su participación en las denominados subprimes, las hipotecas de alto riesgo que están en el origen de la recesión norteamericana.
Hay quien se cuestiona incluso si, al apresurarse a vender entre el lunes 21 y el martes 22 los 50.000 millones de acciones compradas por el broker -ayer fue interrogado por la Policía-, SG pudo haber desencadenado la tormenta financiera que sufrieron los mercados a principios de semana o contribuido a ella, según publicó ``Le Monde''.
En ese caso, la Reserva Federal estadounidense, que se vio obligada a bajar en tres cuartos de punto el precio del dinero para inyectar cierta dosis de confianza y evitar nuevas espantadas, se contaría entre las víctimas de la insólita situación vivida por Société Générale, agrega el diario francés.
Desde un punto de vista meramente técnico, los especialistas en informática bancaria admiten no entender nada y la mayoría se confiesan sorprendidos pero no piensan que los fallos en los sistemas de control tengan un origen técnico. Apuntan más bien a la definición interna de las reglas de control de riesgos y al hecho de que los bancos «confían demasiado» en sus trabajadores cuando demuestran que son capaces de ganar dinero.
Intentos de desvinculación
Mientras, en el campo político la consigna de los mensajes enviados desde los primeros momentos, comenzando por el propio presidente francés, Nicolas Sarkozy, era desvincular el caso de Société Générale con la crisis financiera internacional y las subprimes.
«En un caso es un problema de desregulación de un mercado que ha sido objeto de especulación y que necesita más transparencia y moralización». En el otro, se trata, según las palabras del presidente francés, de un «fraude interno que no afecta a la solidez y la fiabilidad del sistema francés». Así lo dijo Sarkozy en Nueva Delhi durante su viaje oficial.
En la misma línea reaccionó el primer ministro François Fillon quien, no obstante, dejó ver el malestar del Ejecutivo por haber sido informado de este turbio asunto tres días después de que SG hubiera alertado al Banco de Francia y a la Autoridad de los Mercados Financieros. Fillon ha encargado al Ministerio de Economía un informe para conocer en los próximos ocho días las circunstancias del fraude.
En las filas de la oposición del PS, la petición ha sido un «reajuste» bancario, en el caso de la ex candidata a la presidencia, Ségolene Royal. «Frente a tales comportamientos el Estado debe ser fuerte. Hay un déficit de política, de autoridad, de voluntad de reglamentación», se quejó. El primer secretario del PS, François Hollande, reclamó «más transparencia por parte de los bancos».
El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, consideró que a la vista del fraude de 4.900 millones de euros hay que «reforzar formidablemente los controles internos» en los bancos.
El control interno de los riesgos en todas las entidades es «la lección que hay que sacar, como en fraudes precedentes de gran amplitud», indicó Trichet.
En este contexto se puede ver amenazada la independencia de la entidad financiera, según los análisis de la prensa económica gala sobre las consecuencias del agujero. Así ``Les Echos'' apuntaba la posibilidad de que su principal rival, BNP Paribas, aproveche la ocasión para lanzar una OPA, si es que no lo hacen antes otros bancos europeos.
«Si su viejo competidor, BNP Paribas, no aprovecha la ocasión, hay una fuerte probabilidad de que otro grande europeo, como el italiano UniCredit, más deseado por una parte de los gestores, lo haga», señaló.
«La situación financiera vuelve a estar, parece ser, bajo control y los intereses de los ahorradores garantizados, pero de ahora en adelante es evidente que SG no saldará indemne de semejante crisis», resaltó por su parte, ``Le Figaro''.
Algunas voces no desechan la hipótesis de que el anuncio del «fraude excepcional» haya servido de parapeto para relegar a un segundo plano los más de 2.000 millones que ha perdido SG por las «subprime».