El Caja Rural se mantiene fiel a su filosofía de los últimos años y en 2008 presenta un equipo sub 23, con sólo tres élite. El conjunto se ha renovado ante el paso a profesionales de cuatro corredores y la Vuelta a Nafarroa volverá a ser el máximo objetivo. Las dificultades para fichar en casa ha llevado a que sólo tengan dos navarros en sus filas.

El Club Ciclista Burunda presentó ayer todos sus equipos en Altsasu. El salto de Mikel Nieve y Daniel Sesma (Orbea), José Vicente Toribio (Viña Magna) y Delio Fernández (Karpin-Galicia) ha supuesto que el equipo pierda a sus cuatro referencias, y se han reforzado con 11 caras nuevas. La plantilla amateur es de 20 ciclistas, todos sub 23, excepto Héctor Espasandín, Miguel Ochoa y Rubén Martínez, de primer año élite y que deben asumir el peso del equipo.

El director Alejandro Hernández estima que se trata de «un bloque bastante compacto y joven. Hemos perdido cuatro pilares, pero hemos hecho buenos fichajes, como Martínez y Ochoa, que nos tienen que dar presencia en las vueltas». Confía en que Garate, Zabalo o De la Parte «den un paso adelante».

Bajo la tutela de Floren Esquisabel, Hernández compartirá la dirección con Francisco Jiménez y Eugenio Goikoetxea.

El equipo es uno de los convenidos con la Fundación Euskadi y la relación es fluida. Si en 2008 han dado el paso al Orbea Nieve y Sesma, en años anteriores lo hicieron Aramendia, Barrientos, Verdugo, Galparsoro, Egoi Martínez o los hermanos Flores, bien al Euskaltel-Euskadi o a su filial. Y otros como Azanza, Oroz o Bru también han terminado de naranja.

Según nos avanza Hernández, el calendario se centrará en las pruebas vascas y disputarán la Copa de España y la Copa del Porvenir. Tienen programadas 11 vueltas: Valladolid, Extremadura, Bidasoa, Nafarroa, Bira, Cantabria, Madrid sub 23, Palencia, Goierri y Aragón, así como la Vuelta a España élite. «La Vuelta a Navarra es lo máximo para nosotros«, recalca.

Llama la atención que sólo hay dos navarros, Zabalo y Moreno. Hernández nos lo aclara. «Tenemos que salir fuera a por corredores; en casa hay pocos y no vienen. No podemos hacer nada. Tenemos que tener más unión entre nosotros y la Federación para intentar que los chavales se queden en casa».