UGT mostró ayer su satisfacción por la sentencia que daba la razón a los demanantes y declaraba nulo el despido de uno de los tres miembros de este sindicato despedido de Onena, propiedad de Ignacio Mendizabal.

Resta por conocer la suerte de los restantes 8 trabajadores, aunque se espera que esta misma semana se haga público el fallo. Pese a que los 9 despedidos -entre ellos los cinco miembros del comité de empresa- acudieron al juzgado en la misma jornada, el pasado día 13, la defensa de los tres miembros de UGT corrió a cuenta del propio sindicato, mientras que LAB, ELA y CGT realizaron una defensa conjunta.

UGT aseguró en una nota que no tiene «ninguna duda» de que, dado que los hechos que se juzgan son similares en los nueve casos, las ocho sentencias restantes también declararán nulos los despidos.

Según UGT, «se ha hecho justicia y se ha reparado en parte el daño causado a los trabajadores con unos despidos que no tenían precedentes en Navarra ni en España, y que significaban una vulneración de la Constitución, así como un ataque a la libertad sindical y al derecho de representación de los trabajadores».

Para UGT, «actuaciones empresariales como la protagonizada por la dirección de Onena, significan una trasgresión del principio de reconocimiento mutuo entre empresa y representantes sindicales y vulneraban el diálogo y la concertación como elementos vertebradores de las relaciones laborales».

UGT espera también que la vía penal contra veinte trabajadores de Onena, entre los que se encuentran los nueve despedidos, que sigue abierta, coincida en su resolución con los criterios establecidos en esta sentencia del juzgado de lo social, y no se aprecie delito alguno.