El cuerpo sin vida de Javi Ruiz se encontraba en el Puerto de Vitoria, camino hacia el monte Arrieta. Es una zona boscosa, junto a una pradera, de difícil acceso. De hecho, ha costado casi una semana encontrarlo. Y ayer mismo, uno de los muchos grupos de voluntarios que se introdujeron en los montes en su búsqueda pasó a cuarenta metros sin verlo. Finalmente, dos miembros del equipo especial de rescates de la DYA lo localizaron, tumbado sobre el suelo, hacia las 14.30 .

Un helicóptero del 112 de la Junta de Castilla y León rescató el cadáver y lo trasladó al Instituto Anatómico Forense de Burgos, donde deberán realizarle la autopsia.

De esta forma se confirmaban los peores augurios de los muchos amigos, compañeros de militancia, familiares y vecinos que a primeras horas de la mañana de ayer se concentraron en la pequeña localidad treviñesa de Arrieta para colaborar en las tareas de búsqueda. Allí había residido Javi Ruiz los últimos veinte años y, por ello, quizás era la persona que mejor conocía los montes de la zona en los que ha perdido la vida.

Desaparecido el lunes

La familia tuvo conocimiento de la desaparición de Javi Ruiz el pasado lunes a mediodía. Inmediatamente, dieron cuenta del hecho a la Guardia Civil y se pusieron en contacto con los grupos de rescate de la Ertzaintza, que el mismo lunes iniciaron la búsqueda. Desde el martes, se unieron al dispositivo grupos de rescate de Castilla y León.

Durante estos días, los grupos más especializados han peinado las zonas más boscosas alrededor de Arrieta, mientras que los voluntarios han recorrido lugares emblemáticos para Trebiñu a los que Javi tenía un especial cariño.

Ayer todos esos medios se vieron aumentados, gracias al llamamiento público para realizar una búsqueda especial de toda la zona, uniéndose a los grupos especiales de Guardia Civil, Ertzaintza, DYA y Cruz Roja al menos 150 voluntarios que se dividieron en 25 grupos. Los guar- das forestales de la zona hicieron las labores de coordinación, como subrayó, agradecido, el hermano de Javi, Santi Ruiz.

Todo el monte comprendido entre Argantzun y Okina fue parcelado para que no quedara una sola zona sin cubrir.

«Activista social»

Javi Ruiz encaja a la perfección en la denominación «activista social» con la que firmó algunos artículos publicados en GARA, por su militancia en el sindicalismo, a favor de la integración de Trebiñu en Araba, en el impulso de medios de comunicación alternativos... y siempre a favor de esa naturaleza que tan bien conocía. Una intensa vida militante que se inició en el terreno sindical en las huelgas obreras de 1976 en Gasteiz, que acabaron con los graves sucesos del 3 de marzo. Trabajaba en Forjas Alavesas, después Sidenor, empresa que abandonó hace veinte años para irse a vivir a Arrieta.

Trabajó en otros ámbitos, por ejemplo, siendo uno de los creadores de Hala Bedi Irratia y ayudando también a crear emisoras populares en Sahara y Guatemala. En Trebiñu, ha sido un conocido militante por la integración del enclave alavés.

La naturaleza y su conservación ocuparon gran parte de su tiempo y esfuerzos, así como la labor social que realizaba participando cada verano en equipos de extinción de incendios.