Más allá del éxito que coseche «Leatherheads», que se estrena hoy en las pantallas de Estados Unidos, se puede asegurar que se trata de una apuesta personal y arriesgada de George Clooney. Primero, deja a un lado la línea de sus dos anteriores trabajos como director, en los que abordaba temas políticos, y se lanza por una comedia clásica estadounidense. Pero además, a diferencia de los papeles secundarios que interpretó en «Confesiones de una mente peligrosa» (2002) y «Buenas noches y buena suerte», se arriesga con el protagonista de su nuevo trabajo.

Para compartir cartel, Clooney ha elegido a la Renée Zellweger, a quien le une una amistas de más de veinte años que de traduce en química en la pnatalla. El actor estadounidense da vida a Dodge Connly, un jugador algo mayor que está empeñado en sacar adelante su equipo de fútbol, integrado más por hinchas que por deportistas y que recuerda a aquel fútbol en el que poco importa el dinero si se ama el juego. Para ello convence a una estrella de la liga universitaria para poder reclamar así la atención de los medios. En ese proceso, conoce a la periodista Lexie Littleton -a la que da vida Zellweger-, con la que disputará un lucha de egos. El intercambio constante de comentarios irónicos entre ambos protagonistas avanza al más que conocido proceso de enamoramiento sin remedio que vive la pareja. Una trama tan usada que incluso ha conseguido acuñar el término de scewball comedy.

Respecto al doblete que supone dirigir y protagonizar un filme, Clooney reconoce que es difícil. Y confiesa: «Hay una enorme cantidad de narcisismo que entra en juego». El director admite lo que debe que tiene su nuevo trabajo a la comedia clásica estadounidense. «Es cierto, plagio a Howard Hawks y Preston Sturges de forma clara, aunque preferiría decir que les homenajeo», afirmó de forma irónica durante la rueda de prensa que ofreció en Los Ángeles. En este intento de recrear la década de los años 20, Clooney explicó que se había decantado por Zellweger porque tiene una apariencia «no necesariamente contemporánea». Los halagos llovieron en ambas direcciones, por lo que la actriz no dudó en destacar la facilidad de Clooney a la hora de dirigir.