automovilismo
Las marcas piden el cese del presidente de la FIA
GARA | SAKHIR
Los fabricantes automovilísticos BMW, Mercedes Benz, Toyota y Honda, todos ellos participantes en el Campeonato del Mundo de Fórmula Uno, se han mostrado muy críticos con el presidente de la Federación Internacional (FIA), el británico Max Mosley, y creen que no debe continuar al frente de este organismo por participar en una supuesta orgía sadomasoquista con tintes nazis.
Para BMW y Mercedes Benz, que lo han hecho de forma conjunta, «el contenido de lo que se ha publicado es repudiable». «Nos distanciamos explícitamente como empresa de ello», afirmaron ambas marcas. Lo ocurrido afecta a Mosley «en lo personal y como presidente», prosiguen, por lo que esperan «una reacción de los gremios relevantes de la FIA» ante lo que consideran una situación «insostenible» para el mundo del motor.
El fabricante japonés Toyota también dudó de que Mosley deba seguir en la presidencia de la Federación. «Toyota Motorsport desaprueba cualquier tipo de comportamiento que pueda dañar la imagen de la Fórmula Uno, y en particular cualquiera que pueda ser entendido como racista o antisemita», aseguró.
«Los altos cargos del deporte o los negocios, incluido el deporte del motor, deben basarse en el buen comportamiento. Una vez conocidos todos los hechos, corresponde ahora a la FIA decidir si el señor Mosley ha cumplido con las obligaciones morales que su puesto de presidente le atribuyen», añadió.
Honda también se manifestó como «decepcionada con los sucesos que han rodeado al señor Mosley y creemos que se ha dañado la reputación de la Fórmula Uno y de quienes participan en este campeonato», afirmó.
El pasado domingo el tabloide británico «News of the World» publicó extractos de un vídeo en el que aparecen imágenes gráficas de Mosley mientras participa en una «orgía depravada al estilo nazi con cinco prostitutas en una mazmorra de tortura».
En el mencionado vídeo, de cinco horas de duración, se ve cómo Mosley, de 67 años, «interpreta el papel de comandante en un campo de concentración» y, entre otras cosas, «da órdenes en alemán a las prostitutas, a las que golpea en el trasero con un látigo».
No estará en Bahrein
El propio Mosley remitió una carta a la FIA en la que no niega su participación en el encuentro, sino sus referencias con el nazismo, afirmó que se querellará contra «News of the World» e insistió en su intención de permanecer al frente del organismo automovilístico.
De momento, el presidente de la FIA, que también contestó en un tono muy duro a BMW y Mercedes, no acudirá este fin de semana a Bahrein para seguir el tercer gran premio del Mundial de Fórmula Uno. Según el diario británico «The Times» así se lo exigió el jeque Salman Bin Hamad Al-Jhalifa, príncipe heredero del reino de Bahrein, quien le ha escrito una carta en la que le comunica que es persona «non grata» en su país.