Las obras en la red de Bilbo dejan sin agua a unas 150 viviendas de Errekalde
Las obras en la red de suministro de Bilbo se desarrollaban ayer con normalidad, con la bajada de presión anunciada, salvo para 150 vecinos de la zona alta de Errekalde que se quedaron sin agua. Los trabajos afectan a una población estimada de 150.000 personas.
GARA |
Los vecinos del barrio de Errekalde que se quedaron sin suministro de agua en sus viviendas a consecuencia de la bajada de presión, hubieron de aprovisionarse a lo largo de la jornada de ayer en 24 columnas de agua distribuidas por el Ayuntamiento de Bilbo en la calle.
Según informó en una conferencia de prensa el concejal delegado de Obras y Servicios del municipio bilbaino, José Luis Sabas, los trabajos empezaron ayer a primera hora de la mañana. Posteriormente, en torno a las nueve, comenzaron a realizarse los tajos en las tuberías que provocaron la bajada de presión en grandes zonas de la capital vizcaina a partir de las diez de la mañana.
Sabas informó de que la más afectada fue la zona alta de Errekalde, en concreto los pisos más altos situados en las calles Mendipe, Tolosa y La Paz. En total, se quedaron sin agua unas 150 viviendas. En estos inmuebles, el suministro llegaba hasta la tercera o cuarta planta, pero no contaban con agua las casas de los sextos, séptimos e incluso algunos quintos pisos.
Nuevas conducciones
El Ayuntamiento colocó en estas zonas un total de 24 columnas de agua (seis en Mendipe, seis en Tolosa y doce en La Paz), por lo que los afectados por el corte pudieron acceder a agua potable en la calle.
Además, el concejal de Obras y Servicios advirtió de que la hora crítica en esta operación iba a ser entre las dos y las cuatro de la madrugada, justo antes de que finalicen las obras en la red de suministro. En ese momento se retomaría el sentido normal de fluido del agua, que fue cambiado ayer por la mañana para poder operar en la red de abastecimiento.
Las obras que se estuvieron realizando durante la jornada de ayer servirán para ejecutar los empalmes necesarios entre la red existente y las nuevas conducciones instaladas entre las calles Gordoniz y Altube. Estos trabajos, que se iban a prolongar, previsiblemente, hasta las cuatro de la madrugada de hoy, lunes, afectan en total a una población estimada de 150.000 personas, pertenecientes a los distritos 1, 2, 5, 6, 7 y 8 de la capital vizcaina.
Restricciones circulatorias
Una vez que se pongan en funcionamiento los nuevos empalmes, el Ayuntamiento de Bilbo continuará las obras necesarias para la instalación de nuevas conducciones, tanto de abastecimiento de agua de boca como de saneamiento.
Además, procederá a la urbanización de las calles afectadas por estas obras y a la anulación de las restricciones en la circulación establecidas durante las pasadas fechas.
Esta actuación en materia de renovación de las redes de abastecimiento de agua en la capital vizcaina permitirá, entre otras cosas, acometer la mejora del depósito municipal situado en Elexabarri.
El Consistorio bilbaino recomendó ayer a los vecinos que, una vez restablecido el servicio de suministro, se deje correr el agua en los diversos servicios de las viviendas durante unos minutos, para limpiar así las tuberías de impurezas.
Las obras de esta última fase de renovación de redes en el núcleo urbano de Bilbo, cuyo presupuesto supera los dos millones de euros, se iniciaron el pasado mes de julio, aprovechando la bajada del nivel de los caudales en época estival y la menor afección que supone la coincidencia de una actuación de esta envergadura con las vacaciones de verano.
Desde entonces, y a lo largo de estos últimos meses, se ha dado continuidad a las conducciones para evitar el corte de agua en las viviendas situadas en las zonas altas de la ciudad.
Paralelamente, se ha renovado la red de abastecimiento y saneamiento de las calles Gordoniz (tramo Altube-Biarritz) y Altube, mediante la sustitución de parte de las conducciones anteriormente existentes por otras nuevas de mayor capacidad.
De esta forma, se han mejorando las redes de la citada zona, según informó el Ayuntamiento de Bilbo a través del concejal de Obras y Servicios.
La hora crítica de la operación iba a ser entre las dos y las cuatro de la pasada madrugada, justo antes de que finalizasen las obras en la red de suministro de agua. A partir de hoy se espera volver a la normalidad.