Un juzgado de Bilbo rechaza la declinatoria de EDF y se declara competente
GARA |
El juzgado número 2 de lo Mercantil de Bilbo desestimó la declinatoria de falta de competencia internacional presentada por EDF y se considera competente para mantener las medidas cautelares que impuso a la multinacional eléctrica francesa sobre sus planes respecto a la empresa Iberdrola.
El titular de este juzgado, el magistrado Edorta Etxerandio, acordó, a petición de Iberdrola, el pasado 26 de marzo, que el grupo EDF debía comunicar mediante anuncios en cinco periódicos españoles y extranjeros si prepara una operación de compra sobre Iberdrola, ya sea en solitario o con la ayuda de terceros, y si el objetivo de la adquisición es el «desmembramiento o reparto» de los activos de la eléctrica con sede en Bilbo.
EDF presentó ante este juzgado, el pasado 4 de abril, una declinatoria de competencia internacional al considerar que el magistrado no estaba capacitado para obligarle a publicar esos anuncios, los que hasta ahora no ha hecho, por entender que el asunto no corresponde a la jurisdicción del Estado español.
Tras la presentación de alegaciones a la declinatoria de EDF por parte de Iberdrola y la fiscalía, en las que defienden que los tribunales españoles ostentan la competencia para resolver las medidas cautelares, el juez Edorta Etxerandio hizo público ayer el auto que firmó el lunes.
El magistrado, que dice que las medidas establecidas no son «auténticas medidas cautelares» sino medidas «anticipatorias de naturaleza ejecutiva», señala que EDF puede presentar un recurso de reposición contra este fallo, sin que ello suponga «efectos suspensivos» de la resolución.
Además, el juez condena a la eléctrica francesa a pagar las costas de este último procedimiento de solicitud declinatoria de competencia.
Contrato con Alkargo
Por otro lado, la multinacional de origen vasco anunció ayer la firma de un «acuerdo estratégico» con la empresa Alkargo, pertenenciente a MCC, para el suministro de transformadores eléctricos por un importe de alrededor de 30 millones.
Iberdorla, en una nota de prensa, indicó que el convenio, cuya vigencia será de dos años -entre 2008 y 2010-, contempla la entrega de entre 45 y 50 equipos, cuyas potencias oscilarán entre 12,5 y 25 megavoltio amperios (MVA), para instalar en las subestaciones que cuenta la empresa en el Estado español.
La empresa indicó que este acuerdo es una «nueva muestra del firme compromiso de Iberdrola con el desarrollo económico y social del País Vasco». La empresa cifró en más de 5.000 millones su aportación a la CAV en los últimos cinco años.