Pregón de Josean Kerejeta, que renueva el compromiso del Baskonia con Araba
GARA |
Josean Kerejeta inició su discurso de llamamiento a las fiestas de San Prudencio y la Virgen de Estibaliz afirmando que en el viaje que hace ya 34 años realizó desde su localidad natal, Lazkao, hasta Gasteiz, donde reside, había algo de «predestinación», ya que Lazkao y Araba comparten patrón, San Prudencio, «y los conventos que son un referente religioso y culural en Lazkao y en Estibaliz son conventos benedictinos de una larga y reconocida trayectoria».
El presidente del Baskonia subrayó en su discurso las ideas de hospitalidad y pertenencia, que en su opinión definen a los alaveses, y que «en el mundo que nos toca vivir cobran especil relevancia», porque la vid hoy «es más dinámica que nunca». Son ideas que, según apuntó asimismo el presidente baskonista, pertenecen también al mundo del deporte.
El Baskonia pretende ser, en palabras de su presidente, «el representante deportivo, no exclusivo, pero sí fundamental, de nuestro territorio alavés en el resto del mundo».
Los equipos profesionales «son hoy un ejemplo de integración», dijo Kerejeta, para quien la identidad entre afición y equipo no depende de quién integre su plantilla, «sino de su identificación con unos valores, con el carácter que da valor al equipo, que lo hace identificable». Incluso, aseguró, la propia idea de cantera es hoy en día muy difusa. «¿Quién no reconocería hoy a Scola, a Vidal, a Prigioni, como un alavés más? ¿Quién piensa que Splitter hoy y Calderón ayer no son productos de la cantera del club de baloncesto que es Baskonia?», apostilló a este respecto.
Innovación
El pregonero de las fiestas de San Prudencio en Araba se refirió también a otro concepto, el de innovación, que «en cualquier apartado de nuestra vida económica o social es indispensable», y aseguró que el Baskonnia quiere «innovar, estar en constante evolución para poder seguir perteneciendo a una élite deportiva que ponga a nuestro territorio en el mundo».
Afirmó Kerejeta que para el Baskonia «es importante comprender que los retos de nuestra sociedad nos atañen» y que, en coherencia con los esfuerzos que se hacen en otros terrenos de la vida política, social y económica del territorio alavés, el Baskonia hace «la firme promesa de ponerse desde ya a indagar y a trabajar sobre lo que debe ser y no ser un club del siglo XXII». Y en ese sentido, aseguró, «renuevo el compromiso de nuestra entidad deportiva con la sociedad alavesa. Queremos progresar, crecer, convertirnos en una institución deportiva alavesa para el orgullo de los alaveses y alavesas».
En esa «firme convicción» el mandatario del Baskonia situó el reto de jugar dentro de pocos días su cuarta final europea consecutiva que, dijo, «vamos a ganar».