El cilista navarro Patxi Vila ha dado positivo por testosterona y no podrá correr el Giro que comienza el próximo sábado en Palermo. Esa es la dolorosa noticia que se conoció en la tarde-noche de ayer y que ha creado una gran conmoción entre los numerosos aficionados vascos al ciclismo. Según relató ETB ayer, el ciclista habría solicitado el correspondiente contraanálisis y, de confirmarse el positivo, se enfrentaría a una suspensión de dos años. Como suele ocurrir en estos casos, Vila será apartado por su equipo, el Lampre italiano, hasta que se conozca la resolución de su caso. Patxi Vila había preparado con mimo el Giro como en los años anteriores y era uno de los puntales del Lampre tras la negativa de Damiano Cunego a participar en la ronda italiana.

Garzelli repite en Asturias

El italiano Stefano Garzelli (Acqua & Sapone) se adjudicó al sprint la tercera etapa de la Vuelta Ciclista a Asturias disputada entre Llanes y Avilés, de 168 kilómetros, mientras Ángel Vicioso (LA Aluminios-MSS) se mantiene líder de la general, en víspera de la etapa reina.

La tercera etapa tenía una única dificultad montañosa puntuable, el Alto de La Robellada, de tercera categoría (km.33) en cuyas rampas se hizo la fuga del día integrada por ocho corredores: Gorka Verdugo (Euskaltel), Isidro Nozal (Liberty ), José Luis Carrasco (Andalucía), Diego Milán (Acqua), Manuel Vázquez (Murcia), Iván Melero (Orbea), Oscar Pujol (Burgos) y Javier Mejías (Saunier).

A falta de 40 kilómetros, los equipos con especialistas para llegar al sprint tomaron el mando del pelotón y redujeron la distancia hasta conseguir neutralizar a los fugados cuando restaban cuatro kilómetros para la meta. Stefano Garzelli no falló y se adjudicó los 10 segundos de bonificación. Hoy se disputa la etapa reina, con la celebración de cuarta etapa, con salida en Pravia y meta en el Alto del Acebo, en Cangas del Narcea, de categoría especial, de 180 kilómetros, y otros dos puertos, el Pozo de las Mujeres Muertas, de primera, y El Connio, también de categoría especial.

Xabier Lujua y Txiki Burgos, a los mandos de un Skoda Octavia WRC, y con un tiempo de 28.33, lograron la victoria en la primera edición del Rallye de Mungia. Los vizcainos fraguaron su victoria en su regularidad, al mantenerse en la primera sección cerca de Gorka Apalantza y en la segunda por detrás de Apalantza y Artetxe.