La patronal del Metal de Bizkaia pide flexibilizar más la contratación
Ignacio Sáenz de Gorbea, presidente de la patronal del Metal de Bizkaia, pidió una nueva reforma laboral que «flexibilice más la contratación» y «una reducción en las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social». Estas declaraciones las realizó en la presentación de la asamblea anual en la que reconoció que el sector sufre ya la desaceleración económica, aunque en 2oo7 ganaron por encima del 2006.
Juanjo BASTERRA |
La patronal vizcaina del Metal trasladó a los medios de comunicación que los efectos de la crisis financiera están provocando ya una desaceleración en este sector, muy importante en Bizkaia, aunque la facturación de las 1.064 empresas asociadas a la Federación Vizcaina de Empresas del Metal (FVEM) creció en 2007 hasta los 7.800 millones, «por encima del 2006», aunque no se precisó el porcentaje. De esta manera, se confirma que durante los últimos quince años las empresas han logrado de forma ininterrumpida unos resultados económicos muy favorables.
Sin preámbulos, la patronal del Metal pidió una reforma laboral para flexibilizar más la contratación y una reducción de las cotizaciones a la Seguridad Social, a la vez que consideró que los empresarios deben innovar para acercarse a los niveles de productividad europeos.
Argumentos débiles
Sin embargo, los datos reales que la FVEM presentó, tras la celebración de su asamblea anual que reeligió a Ignacio Sáenz de Gorbea en la presidencia, son débiles para llegar a esa conclusión de recesión en el Metal.
Así lo puso de manifiesto el gerente de esa federación integrada en Cebek, Jaime Fernández Alcedo. La desaceleración la establecen en la medida en que el «índice compuesto del metal de Bizkaia» en el primer trimestre de 2008 ha caído un 4,4%, sin embargo ese dato determina que hasta diciembre del año pasado creció un 5,6%, aunque el dato interanual a marzo de 2008 refleja un crecimiento inferior, del 2,5%. «Lo que indica que la industria del metal, básicamente la manufacturera ha perdido un 50% de impulso en los tres primeros meses de este año», precisó Sáenz de Gorbea. Más adelante Fernández Alcedo reconoció que ese índice «puede que no sea real» debido al efecto a la baja en la producción por las vacaciones de Semana Santa.
Entre los factores que están perjudicando la actividad de las empresas se encuentra el elevado precio de la energía y de las materias primas. «Existe un componente de especulación con los intermediarios que, en estos momentos convulsos, los grandes fondos invierten en metales de forma masiva, en vez de los mercados financieros, y retienen la oferta para encarecer su precio».
En base a esa realidad, la patronal vizcaina del Metal aseguró que «ante la crisis» se debe producir una reforma laboral «que flexibilice más la contratación». La FEVM también reclama la reducción de la fiscalización, sobre todo, «la rebaja de las cotizaciones en materia de Seguridad Social, que son excesivas y muy altas».
Sáenz de Gorbea reconoció como «fracaso» de su primer mandato el no haber cerrado desde hace ya cuatro años la negociación del convenio del Metal en Bizkaia, pero dijo que las peticiones de los sindicatos son «muy elevadas». La patronal, según adelantó, no quiere reducir la jornada laboral, «lo que está suponiendo un escollo».
También SEA, patronal de Araba, presentó sus previsiones e instó a «favorecer la flexibilidad en la contratación y en la movilidad funcional y geográfica». Aseguró que se debe al «esfuerzo de las empresas a pesar de la coyuntura que nos rodea» que el empleo «se esté manteniendo y en algunos casos aumentando» e indicó que «es importante que los trabajadores asuman su cuota de responsabilidad», puesto que «el mantenimiento del empleo sólo es posible si se aumenta la productividad o si al menos se mantiene».
El presidente de la Federación Vizcaina de Empresas del Metal, Ignacio Sáenz de Gorbea, apostó por la energía nuclear para «garantizar» el suministro adecuado de potencia para las empresas, dado que cree que es insuficiente en la actualidad. Dijo que «la energía renovable es buena, pero ni es suficiente ni es energía base, que es más barata y no tiene altibajos. La única solución es la energía nuclear», concluyó. Nunca la patronal se había pronunciado con tanta claridad en esta materia. Afirmó que hay empresas en Bizkaia -sobre todo en la zona de Elorrio y del sector de la fundición- que no pueden ampliar su producción por la falta de energía. Agregó que ha habido compañías que «se han trasladado a Araba por este motivo» y que en este primer trimestre «se han producido apagones» que han afectado a la producción nocturna de varias empresas. Sorprende esta manifestación, puesto que hace unas semanas Iberdrola manifestó que el suministro y la calidad energética que ofrece en el ámbito de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa es «óptimo», incluso el Ente Vasco de la Energía ha reconocido en su balance anual que el sector industrial es el más eficiente en esta materia. La patronal tampoco está de acuerdo con la legislación medioambiental, porque «se nos exige más que a los competidores, lo que nos resta competitividad». «Tenemos que comparar derechos de emisión en Francia, porque utilizan la nuclear. Eso nos encarece el producto» y denunció que Lakua «nos exige y después compra productos de empresas y de países donde la legislación medioambiental es menos incisiva».