El gasteiztarra entiende que Bennati será el hombre a batir en las llegadas y pronostica que los esprinters ten- drán cinco etapas en un recorrido menos favorable que nunca.

¿Qué supone llegar al Giro con dos victorias pese a correr muy poco?

Te da confianza y tranquilidad, no llegas de vacío. Además este año llego en buenas condiciones, no como el pasado, cuando el equipo quería que estuviera adelante, pero llegué cansado porque empecé fuerte desde Mallorca. Éste empecé más tranquilo en Murcia y ya gané allí. Buena señal. Es como mejor me he preparado y tengo muchas esperanzas e ilusión para este Giro.

No parece que vaya a haber muchas opciones para el esprint.

En las trece primeras etapas creo que cuatro o cinco puede haber, aunque en Italia siempre hay emboscadas. Hay algunas con puertos antes y, al estar yo bien, me vienen mejor. Si fueran puertos especialmente duros no llegaría fresco, pero la media montaña para castigar a Cavendish, Brown y McEwen me puede favorecer.

¿Cuál es su objetivo?

Ganar una etapa. Si se puede más, mejor, pero una no estaría mal. Aún no he ganado en una grande y espero que este año me estrene.

Se le ve más seguro de sus posibilidades esta temporada...

Después de la Vuelta cambió mi mentalidad. Me di cuenta de que llegaba a meta y no había esprintado. Esperaba a que arrancaran Petacchi y Bennati y cuando ellos cogen su distancia es difícil rebasarlos. Debía cambiar de táctica y arrancar desde mi distancia. Es lo que he hecho este año y me está saliendo bien. Se trata de perderles el respeto. Cada año he progresado físicamente, pero más aún mentalmente. Tengo más confianza, afronto los esprints con más tranquilidad. Antes iba demasiado nervioso y eso me hacía gastar muchas energías que me faltaban en el esprint. Ahora he madurado y me viene bien.

¿Quién será el esprinter a batir?

Bennati, más que McEwen, que ya no es el de antes. Tiene 36 años y en la Tirreno arrancó en la curva y en sus buenos años no le pasaba nadie. Esta vez le remontaron fácil. En Romandía ganó una etapa, se coloca bien, pero el principal esprinter será Bennati. Ha estado lesionado con la rodilla mal y eso le ha permitido llegar fresco. Ha corrido Trentino y Romandía y llega al Giro con ritmo de competición, pero con la frescura que da empezar tarde. Se vio en su victoria en Suiza, le van perfectas esas llegadas que pican hacia arriba.

¿Ser el líder del Euskaltel en el Giro le provoca una mayor presión?

Para mí no. La presión me la meto yo porque lo quiero hacer bien. Si el equipo espera mucho de mí, mejor, me alegro. Antes, en mis primeros años me metía más presión y con los años he aprendido a tranquilizarme. Voy madurando y no me lo tomo mal, me da igual.

¿Va a tener mucha ayuda en las llegadas por parte de su equipo?

Para echarme una mano estarán Galdos, Alan Pérez e Irizar. También Dioni puede ayudarme en la parte final. Desde luego no tengo a Marco Velo y Ongarato, pero Markel es buen rodador, Alan también y Galdos se defiende muy bien y en los últimos kilómetros tratarán de echar un cable. Estoy contento con el equipo, lo harán lo mejor posible.

¿Sabe cuáles serán sus objetivos después del Giro?

No sé, cuando acabe el Giro hablaré con Igor. La Vuelta la conozco y me gustó porque me parece una carrera sencilla para gente como nosotros, tenemos bastantes oportunidades. No me suele costar andar en setiembre, siempre he andado bien y no me importaría ir, pero algún año me gustaría estar en el Tour y conocerlo. No sé si será éste. Me gustaría ir, pero dependerá de cómo acabe el Giro, de que gane una etapa... Sé que el equipo del Tour es muy bueno con Samuel, Mikel, Haimar... No le voy a decir que quite a nadie para llevarme, pero si tiene una plaza y no se convence por nadie, me gustaría conocerlo, porque antes de disputar las etapas en una grande hace falta haberla corrido para ir viéndola. El Tour es la carrera por excelencia y un esprinter sí puede hacer bien las dos primeras semanas del Giro e ir luego al Tour. McEwen ha hecho varios años Giro, Tour y Vuelta. El año pasado Hushovd hizo Giro y Tour. En principio voy a hacer trece etapas del Giro y luego ya veremos...

¿Para un esprinter no hay aliciente para sufrir la última semana sin una etapa en línea final?

No. Por eso si todo va bien lo ideal es hacer trece etapas, ganar alguna y después retirarme. A partir de ahí tengo más que perder. Si haces todo el Giro te consumes muscularmente en la última semana con los puertos. Pierdes mucho peso y cuesta volverlo a coger. Para un esprinter no es bueno quedarse tan delgado. Pero ésa es mi opinión y luego hay que hablarlo con el equipo.