Usurbil ultima los detalles para implantar la recogida puerta a puerta
Predicar con el ejemplo. Los vecinos y vecinas de Usurbil se han mostrado en numerosas ocasiones contrarios a la incineración; este mismo año serán pioneros en aplicar como alternativa un sistema integral centrado en la recogida puerta a puerta y el compostaje.
Maider EIZMENDI
Las calles de la capital donostiarra acogerán hoy, a partir de la seis de la tarde, una marcha reivindicativa en la que se exigirá por enésima vez la puesta en marcha de alternativas a la incineración para dar respuesta al problema de los residuos.
En Usurbil, donde la sombra de la incineradora, nunca mejor dicho, acecha de manera especial, han querido predicar con el ejemplo y demostrar a los vecinos de la localidad y al resto de guipuzcoanos que existen alternativas a la incineración y que éstas parten de la recogida selectiva de calidad y el impulso del compostaje.
En esta localidad de 5.800 habitantes están ultimando los preparativos para poner en marcha un sistema integral de recogida y tratamiento. Tal y como afirma el alcalde, Xabier Mikel Rekondo, con este proyecto quieren responder, por un lado, a lo exigido por la ley, que obliga a los municipios de más de 5.000 habitantes a recoger los residuos selectivamente; por otro, a hacer frente a la incineradora que se pretende construir en Zubieta, núcleo administrativamente cogestionado por el Ayuntamiento de Usurbil y el de Donostia. «El sistema planteado puede vaciar de contenido el proyecto de la incineradora, porque puede incluso reducir hasta un 20% el porcentaje de resto -materia que no se puede reciclar», matiza Rekondo.
Por su parte, el concejal de medio ambiente de Usurbil y a la vez vicepresidente de la Mancomunidad de San Marcos, Imanol Azpiroz, desgrana el principio primordial del proyecto: «La basura la generamos todos y todas; y todos y todas debemos involucrarnos en darle una solución». Los datos de los que disponen en la Mancomunidad son el reflejo del trabajo que queda por hacer: «Más del 90% de los residuos son reciclables, pero en Gipuzkoa no se llega a recoger selectivamente ni el 20% de los residuos domésticos».
Para aumentar este último porcentaje, en Usurbil quieren implantar este próximo otoño un sistema basado en cuatro ejes: la instalación de un garbitxiki en Zubieta, el reparto de máquinas compostadoras en las viviendas diseminadas, la puesta en marcha de la recogida puerta a puerta en el casco urbano, y el impulso de compostaje comunitario en el centro comercial Urbil.
Sobre este último punto, los responsables municipales contabilizan que el hipermercado y el centro crean al año 770 toneladas de residuos, lo equivalente al 25% de lo que producen los habitantes de la localidad. Una gran parte la compone la materia orgánica. El objetivo es que el mismo centro e hipermercado gestionen sus residuos y composten in situ esta materia. Para ello, no descartan tomar medidas fiscales que obliguen a estas empresas a involucrarse tanto en el tratamiento como en la disminución de los residuos que generan.
En el casco urbano se procederá a poner en marcha la recogida puerta a puerta, sistema que, como los propios representantes municipales pudieron comprobar en un viaje, ha logrado muy buenos resultados en los Països Catalans. Los vecinos tienen establecidos días concretos para dejar a las puertas de sus casas la fracción concreta: un día el papel, al siguiente los envases, al tercero la materia orgánica... Los empleados los recogen no sin antes cerciorarse de que están cumpliendo con las normas y depositan tan sólo lo que corresponde a cada día.
En el caso de Usurbil aún están por concretar los días y las horas en las que se procederá a la recogida, puesto que esos detalles y muchos más los fijarán los propios vecinos durante la campaña informativa que prevén poner en marcha tras el verano. Precisamente el éxito de estos sistemas reside en la participación y sensibilización de la ciudadanía; tener conciencia de que el problema de los residuos es de todos y todas.
En Zubieta se instalará lo que denominan un garbitxiki, al que los vecinos y vecinas deberán acceder con una tarjeta magnética que los identifique y depositar sus residuos en compartimientos diferenciados. Pero, tal y como afirmó Azpiroz, también impulsarán el compostaje doméstico, el cuarto eje de este proyecto. A las personas que viven en las viviendas diseminadas se les ofrecerá una máquina compostadora individual. En Usurbil existen en total 432 caseríos o viviendas con jardín fuera del núcleo urbano, que se estima producen el 23% de los residuos. Su materia orgánica la podrán utilizar para producir compost y beneficiarse de un abono casero. «El problema de los residuos se puede convertir en una potencialidad», así se expresa Peio Lozano, vecino de la cercana localidad de Urnieta que lleva unos diez años produciendo compost con los residuos orgánicos. «Hoy en día, a consecuencia del debate que se ha creado en torno a la incineradora, estoy muy concienciado con el problema de los residuos, pero comencé a compostar porque necesitaba abono para la pequeña huerta que tengo detrás de casa».
A día de hoy emplea los residuos orgánicos de seis familias, aproximadamente unas 18 personas, para compostar. «En invierno recojo su basura una vez por semana, y en verano dos veces». Afirma que el compost que obtiene es de muy buena calidad y obtiene unos resultados muy «satisfactorios». Hay quien dice que será demasiado el compost resultante de la materia orgánica. Lozano contradice esas afirmaciones: «Para la pequeña huerta que tengo, además del compost que produzco, utilizo la gallinaza de 48 aves y las camas y excrementos de 4 conejos, y dos veces por año traigo residuo prefermentado de una vaquería cercana».
Usurbil va a ser pionera en la aplicación de este tipo de sistemas en Gipuzkoa y eso, precisa Azpiroz, además de «una gran satisfacción provoca un profundo respeto». «Pero estoy convencido de que las cosas van a salir bien, los vecinos y vecinas van a responder y vamos a abrir el camino a otros municipios», manifiesta. Y es que, aunque el concejal de medioambiente no ha querido adelantarse a los acontecimientos, ha precisado que otros ayuntamientos se han interesado en la implantación del puerta a puerta y el compostaje. «Oiartzun ya ha pedido subvenciones para poner compostadoras comunitarias en varios barrios; Hernani ha pedido ayudas para instalar un garbitxiki en Ereñotzu...», pone como ejemplos.
«Hay mucho camino por hacer»
En la Mancomunidad de San Marcos existe una gran potencialidad para aumentar los porcentajes de reciclado, comenta Jordi Colomer, técnico catalán que colabora en la institución supramunicipal como asesor. «Lo que me he encontrado es una muy buena experiencia en la recogida de vidrio y niveles buenos en la recogida de papel; pero, al contrario, los niveles no son muy buenos en la recogida de envases y nulos en la recogida de orgánica. Los índices de recogida selectiva de residuos domésticos es la habitual con contenedores, de alrededor del 20%». Son, en su opinión, porcentajes globales «bastante malos», porque «la fracción más importante, que es la orgánica, no se está recogiendo selectivamente». «Hay mucho camino por hacer», incide.
En opinión de Colomer, es preciso que se incentive a los municipios que trabajen por la recogida selectiva y minimicen sus residuos, tal y como se hace en Catalunya: «A los municipios no se les ha incentivado a realizar recogida selectiva, porque los costes de San Marcos, en vez de atribuirlos a quien los está generando, se pagan a través de un fondo común y el déficit resultante repercute a los municipios en base al número de habitantes; no se premia a los municipios que hacen un esfuerzo. Eso debe cambiar».
En cuanto a un posible aumento de las tasas, afirma que hasta ahora no se han incorporado los gastos ambientales. Aun así, asegura que con el sistema puerta a puerta «aumentan los costes de la recogida selectiva», pero «se obtienen más ingresos en los materiales reciclables que no nos da la recogida en contenedores».
A la pregunta de qué se va hacer con el material que no se va a poder reciclar responde tajante: «El objetivo primordial es hacer salto. No nos podemos poner a pensar qué vamos a hacer con el 20% de residuos si aún no hemos hecho nada para que disminuya al 20%». «Si no ponemos en marcha alternativas -precisa Colomer-, sobredimensionaremos la incineradora, que va a necesitar exportar residuos de otro sitio para que pueda estar funcionando al cien por cien».
Eusko Ikaskuntzaren Asmoz Fundazioak eta San Markoseko Mankomunitateak antolatutako hiri hondakinei buruzko jardunaldietan parte hartzeko hogeita zazpi pertsonek eman dute izena -udal ordezkari eta ingurumen teknikariak, batez ere-. Aste honetan, Usurbilen abian jarri nahi duten proiektuaren berri izan dute, eta, datorren astean, besteak beste, Puigpunyent, Mallorcako herriaren esperientziaren berri izan, eta tailer praktikoa egingo dute. Jardunaldiek datorren uztailaren 3a arte iraungo dute. Azken egun horretan, parte-hartzaileek landu dituzten edukien gainean eztabaida egingo dute.