Las reacciones de la mayoría de los partidos políticos al último comunicado de ETA remitido a este diario se centraron en el debate en torno al proyecto del TAV, dejando a un lado otros de los atentados que reivindicó la organización armada: el que tuvo lugar el 8 de junio contra las instalaciones de «El Correo Español» en Zamudio o las acciones contra intereses turísticos en Cantabria.

En esta línea, el portavoz parlamentario del PSE, José Antonio Pastor, aseguró que «queda demostrado» que ETA es «el principal enemigo del progreso». Además, indicó que esto «pone en evidencia las contradicciones en las que se ha movido también el Gobierno vasco, que hasta hace escasas semanas seguía poniendo en duda la autoría de ETA en los atentados de la Y vasca».

En declaraciones a Europa Press, hizo referencia a las acusaciones de ETA respecto a que el PSOE mantiene «una apuesta por la guerra». Pastor indicó que «este tipo de amenazas, por desgracia, no pillan por sorpresa a los socialistas», sino que sirven para «reforzar la voluntad de los propios socialistas, del Gobierno [español] y del Estado de Derecho de terminar con ETA».

En cuanto al acto propuesto por el PP en defensa del TAV, dijo que es una idea «a considerar» aunque «no la sacralizaría porque se han hecho múltiples declaraciones de apoyo a la Y vasca en las Juntas Generales y en el Parlamento vasco».

También el portavoz del PP de la CAV, Leopoldo Barreda, aseguró que el comunicado de ETA «confirma lo que todos sabíamos en Euskadi salvo el propio Gobierno vasco», es decir, que la organización armada «está detrás de todos los ataques a la Y vasca».

Insistió en la propuesta lanzada por su partido para realizar una manifestación de apoyo al TAV y recordó que el próximo mes el presidente del PP de la CAV, Antonio Basagoiti, realizará una ronda de contactos con otras formaciones para promover esa marcha. Esa iniciativa no contará con el apoyo de EA ni de Aralar.

Mikel Irujo, secretario de Comunicación de EA, aseguró que el comunicado es «una nueva barbaridad y algo totalmente desfasado y sin retorno», ya que «a nadie en la Unión Europea se le ocurre poner bombas por estar en contra de un proyecto».

«Cuando estás en contra de un proyecto, tienes mil maneras de protestar, porque eso es democracia, y en democracia también hay que saber perder, y es obvio que este grupúsculo de gente todavía no tiene la madurez democrática suficiente para reconocer que a veces se gana y otras se pierde», comentó.

En similares términos se pronunció Mikel Arana, portavoz de la presidencia de Ezker Batua, que exigió a ETA «su disolución sin condiciones».

Por su parte, el vicecoordinador de Aralar, Jon Abril, resaltó que considera «totalmente inaceptable la injerencia de ETA en la lucha civil contra el tren de alta velocidad».