ANÁLISIS | ARNALDO OTEGI BAJO LA LUPA DE LOS MEDIOS
Punto y seguido a las especulaciones periodísticas
Hace poco más de un mes, «El País» afirmó en su portada que «Otegi dejará el liderazgo abertzale al salir de la cárcel». Ayer, en su crónica sobre el acto de Elgoibar, no hacía ni la mínima referencia a lo que presentó como gran exclusiva
Txisko FERNÁNDEZ Periodista
Durante este verano, mientras se acercaba la fecha de su excarcelación, la relevancia de la figura política de Otegi iba creciendo a golpe de titulares. Mientras algunos medios le jubilaban de la vida pública, otros auguraban su regreso como portavoz de la izquierda abertzale.
Las cámaras y las plumas de muchos medios de comunicación se dieron cita el sábado en Elgoibar no sólo para dar fe de lo que allí estaba previsto que ocurriera -un ongietorri a Arnaldo Otegi en su pueblo tras permanecer quince meses encarcelado por orden del mismo gobierno que le había reconocido como interlocutor en un proceso negociador-, sino también para ver si se confirmaban las especulaciones publicadas por ellos mismos o, por el contrario, la realidad contradecía sus previsiones y deseos.
Así lo reconocían algunos periódicos en sus ediciones de ayer. «Arnaldo Otegi acalló ayer las especulaciones en torno a su futuro tras salir de la cárcel el pasado 30 de agosto y dejó bien claro que no abandonará sus compromisos políticos». De este modo arrancaba la crónica en «Deia». Curiosamente, punto y seguido, este medio se inclinaba por lo especulativo: «Otra cosa es si estará en primera línea de fuego o en la reserva, eso lo decidirá la izquierda abertzale o los tribunales...»; curioso porque en su portada el rotativo bilbaino aseguraba que «Arnaldo Otegi quiere volver a la primera línea de la política».
La del periodista de «El Mundo» comenzaba también resaltando que «Arnaldo Otegi despejó ayer las dudas en torno a su futuro político, pendiente todavía de los procesos judiciales abiertos contra él». Las dudas quedaron despejadas, a su juicio, por el mensaje que más caló entre los medios: el de que su compromiso con Euskal Herria seguirá vigente «hasta que todos los presos políticos estén en la calle». El citado diario madrileño titulaba en su primera página: «Otegi ratifica que continuará con su actividad política y [Gerry] Adams le apoya».
«El País», que el 28 de julio dedicó su principal titular de portada a difundir que «Otegi dejará el liderazgo `abertzale' al salir de la cárcel», optó en esta ocasión por publicar un escueto relato en el que no aparecía ni el mínimo elemento opinativo sobre el papel político de Otegi y, por tanto, no se hacía mención alguna a lo que hace poco más de un mes presentó como una exclusiva que bebía de «fuentes nacionalistas».
Muchos medios coincidían en presentar a Otegi como «ex portavoz de la ilegalizada Batasuna» o «ex dirigente de la izquierda abertzale». «Berria», en cambio, utilizó tanto esa expresión -«ezker abertzaleko eledun ohia»-, en el pie de su principal fotografía de portada, como la que indicaría que sigue ejerciendo esa función -«ezker abertzaleko bozeramailea»-, en el texto que ocupaba toda una página interior.
Entre las cabeceras del Grupo Vocento fue muy dispar el tratamiento que cada cual hizo de la noticia. Mientras «El Correo Español» le otorgaba un pequeño titular en su primera, «El Diario Vasco» decidía que un hecho de semejante relevancia política registrado en Gipuzkoa no merecía ni ese hueco. El vizcaino tampoco ocultó el interés existente por despejar dudas, ya que, tras recoger la frase literal «Ése es mi compromiso con este pueblo», en el texto se indicaba que «este pronunciamiento fue la única referencia que realizó sobre su futuro político...».
El madrileño «Abc», también de Vocento, no se perdía en especulaciones y en su galería de imágenes marcaba opinión con dos frases: «El reencuentro de Otegi. Homenaje al terror», junto a una imagen del acto de Elgoibar. Otra fotonoticia de Otegi junto a un solidario ilustraba una de las dos páginas en las que ese periódico publicaba, con un titular a cinco columnas, «Ex jefes de ETA presos se unen a la revuelta contra la dirección y admiten la «derrota»». En la misma línea, «La Razón» primaba su opinión al relato de los hechos al incluir un artículo editorial encabezado con la afirmación «Otra exhibición del brazo político de ETA sin respuesta judicial».
Peculiar fue el tratamiento del tema en la portada de «Noticias de Gipuzkoa», que otorgaba al protagonista su principal titular pero sin hacer referencia a lo sucedido en Elgoibar: «A Otegi le falta un elemento básico: que se desmarque de la violencia»; frase entresacada de la entrevista con la vicelehendakari de Lakua, Idoia Zenarrutzabeitia (PNV). Y en un titular más pequeño, el diario decía: «Otegi apuesta por otro proceso de paz sin condenar la violencia» y le trataba de «mahaikide».
Y «Diario de Navarra» destacó por su capacidad de resumen, puesto que colocó la noticia en un simple breve.