Movimientos en el tablero del Cáucaso
La guerra del Cáucaso comenzó hoy hace un mes, obligando a la opinión pública internacional a desviar la mirada del espectacular acto de inaguración de los Juegos Olímpicos de Beijing. Desde entonces, la política internacional ha girado en torno a ese espacio geográfico que une a Europa y Asia, un auténtico crisol de culturas y lenguas que en los últimos tiempos se ha convertido en un enclave estratégico desde el punto de vista energético. Allí confluyen oleductos y gasoductos de Asia Central y Oriente Medio que se dirigen hacia Europa como punto de consumo final o para ser tratados y, de ese modo, completar el circuito globalizado de estas fuentes de energía. Por tanto, reducir ese conflicto a un mero juego de influencias políticas en la región entre Rusia y Occidente es, cuando menos, desarcetado.
Evidentemente, el Kremlin sabía lo que hacía cuando decidió intervenir de forma tan contundente para reforzar la independencia de facto que Osetia del Sur y Abjasia mantenían respecto a Georgia desde el desmembramiento de la URSS. Más dudas surgen al preguntarse si el Gobierno georgiano era consciente de que estaba retando a Moscú sin tener garantizado el deseado apoyo de la OTAN, EEUU o la UE.
Los análisis sobre estos aspectos seguirán copando buena parte del espacio dedicado a las relaciones internacionales en los medios de comunicación porque las piezas sobre el tablero continúan moviéndose y no está claro el final de esta partida. Hoy mismo, Nicolas Sarkozy viaja a Moscú para, en nombre de la UE, exigir a Dimitri Medvedev que cumpla el «plan de paz» que el presidente francés entregó a su homólogo ruso, y al georgiano, hace menos de un mes y que contribuyó a que se declarara un oficioso fin de la guerra. La respuesta diplomática de Medvedev es fácil de prever: quien no está cumpliendo el plan -dirá- es Georgia. También hoy, la Corte Internacional de Justicia (CIJ), máxima instancia judicial de la ONU, inicia las audiencias sobre la denuncia presentada por Georgia contra Rusia por supuesta limpieza étnica en Abjasia y Osetia del Sur. Más piezas tambaleándose en el tablero.