Claudio Bravo llegó con un fuerte golpe de sus partidos con Chile, no entró en la convocatoria y Zubikarai seguirá en la portería
Clemente vuelve a Anoeta con necesidad de un buen resultado
Su Murcia ha comenzado la temporada con dos derrotas tras su descenso de categoría y llega en una situación muy delicada, agravada por los problemas internos entre técnico y jugadores que se han aireado en las últimas semanas. Dramé y Necati entraron en la lista.
La visita del Murcia a Anoeta está marcada por la vuelta de Javier Clemente a un estadio que se le da bien, como la Real, con la que ha vencido nueve partidos, ha empatado once y sólo ha perdido cuatro en sus veinticuatro enfrentamientos ligueros desde el banquillo rival.
En las dos últimas visitas a Anoeta del que también fuera técnico realista en sustitución de Krauss, llegó en situaciones muy comprometidas de sus equipos y ganó 0-2 con el Tenerife en el partido que supuso el final de Toshack y su sustitución por Olabe y empató a tres con el Athletic contra la Real de Amorrortu, que poco después también iba a ser destituido.
El de Barakaldo llega hoy en una situación difícil porque su equipo ha perdido los dos primeros partidos y además se airean problemas con su vestuario, sobre todo con Iván Alonso. No es malo que un equipo llegado de Primera venga con estos problemas, pero siempre es un arma de doble filo, porque si el Murcia quiere subir a Primera este año, debe reaccionar ya.
Por contra, la Real tiene la oportunidad de abrir una distancia de siete puntos con uno de los que se presumía como un rival directo. Para lograrla se espera que Lillo presente un once idéntico al de La Romareda con la entrada de Moha o Rivas en lugar del lesionado Gerardo, que no pudo entrar en la lista. Tampoco lo hizo Claudio Bravo, que llegó de Chile con una contusión muscular, lo que implicará que Eñaut Zubikarai tenga un justo premio a su actuación en los dos partidos contra el Zaragoza y a sus declaraciones.
El partido se presenta como un enfrentamiento entre dos concepciones distintas del fútbol defendidas por Clemente y Lillo. Lo cierto es que la Real ya tiene una idea de juego clara y una base del año pasado que le da fuerza en este inicio liguero, mientras que el Murcia es un mar de dudas. Clemente ha presentado tres equipos y tres sistemas distintos en lo que se lleva de temporada y necesitará un tiempo para dar con la llave. Habrá que ver si hoy plantea el partido a la defensiva, como anuncian en Murcia, o presenta alguna sorpresa a Lillo.
Uno de los seguidores de Iñaki Badiola que se han introducido en el club bajo la vitola de «becarios» -no responden a ese carácter porque no tienen ninguna beca ni llegan en virtud de ningún convenio con ninguna universidad-, fue descubierto esta semana tras incorporar un nuevo usuario al dominio Real Sociedad y utilizar para ello la contraseña del administrador de la red, de carácter secreto y que sólo debería conocer él mismo para garantizar la seguridad del sistema informático. El voluntario acude a las oficinas de la entidad a pesar de que los administradores concursales han comunicado al presidente que no deben estar en el club personas que no tienen relación contractual con la Real, sin que tampoco en eso les haga caso.
La Real tiene un sistema informático que imposibilita el acceso externo a su red. Los trabajadores del club firman la cláusula de confidencialidad por la que se comprometen a no difundir fuera la información a la que tengan acceso. Para ampliar la seguridad interna hay una contraseña que sólo la conocía el responsable del sistema informático con una copia de la misma guardada en una caja fuerte. Además hay un control que permite descubrir actuaciones como la del seguidor de Badiola, cuya presencia sistemática dentro del club y la utilización de ordenadores y cables internos le ha facilitado la tarea de descifrar la contraseña y crear un nuevo usuario. Así, podía acceder a todo el sistema informático del club, entrar en los ordenadores de otros trabajadores -que temen que se trate de un caso de espionaje- y apropiarse de cualquier información. Al no tener relación contractual con el club, no ha firmado ninguna cláusula de confidencialidad que le impida difundir la información a la que acceda. Es un incidente tan grave, que fue comunicado a los administradores concursales y al propio Iñaki Badiola. El presidente es el responsable de lo sucedido por permitir que esté dentro del club una persona sin relación contractual pese a la negativa de los administradores concursales, que no han recibido de buen grado la noticia dentro de la locura en la que se ha convertido su relación con el presidente, que no cumple con el comportamiento de alguien que se acoge a la Ley Concursal y debe facilitarles su trabajo.
Así, varios «becarios» se mueven por el club como si fueran trabajadores con el riesgo de que cualquier accidente que puedan sufrir tenga consecuencias para la Real. El protagonista de este acto, que podría ser susceptible de ser calificado como delito de no estar amparado por su presidente, fue el encargado por Badiola de recuperar el foro oficial dentro de una estrategia que desveló GARA. La pregunta es si el voluntario obedecía instrucciones del presidente cuando descifró la contraseña secreta o lo hizo por su cuenta.
ITURRIA
Gerardo no pudo recuperarse y su baja se suma a las de Bravo, Aranburu y Markel. Moha, primer cambio en Zaragoza, y Rivas pueden tener ventaja para cubrir la baja del riojano con respecto al once que empató en La Romareda.
