Carlos Pouso lo advirtió a su llegada, no le gustan las plantillas especialmente amplias porque pueden implicar el ostracismo de alguno de sus integrantes y es partidario de repartir minutos entre sus jugadores.

Sus palabras, desde luego, no se las ha llevado el viento. En menos de un mes de competición, el técnico vizcaino ya ha dado oportunidades a prácticamente todos los jugadores del primer equipo.

Sólo dos siguen esperando y ni siquiera se ha debido a una decisión técnica. Biel Medina sigue recuperándose de la lesión que sufrió en pretemporada e Iván Romero, el último en llegar, necesitaba afinar su forma física tras, viéndose sin equipo, haber entrenado en verano con el Alcorcón.

El resto de la plantilla, 22 jugadores en total, ha podido competir ya. Sólo en Copa, como es el caso de Roberto Pampín y Markel Robles, o con escasos minutos aún, como sucede con Tiko, Paco Sutil o Ander Alaña. Porque evidentemente, por mucho que le gusten las rotaciones, Carlos Pouso tiene sus hombres de confianza; jugadores que, salvo lesión, sanción o situaciones excepcionales, tienen su plaza en el once prácticamente asegurada.

Tres indiscutibles

Eso se desprende, al menos, de las alineaciones dibujadas hasta ahora por el técnico, en las que han permanecido inamovibles tres nombres: Zigor, Jon Urzelai y Raúl García, los únicos que han disputado los cuatro partidos de Liga al completo. También han sido titulares en los cuatro partidos Natxo Insa y Albert Yagüe, aunque en su caso no hayan completado los choques.

El «experimento con gaseosa» -Pouso dixit- de Huesca, por otra parte, dejó algunas «víctimas», pero salvo sorpresa no parece que jugadores como Ibon Larrazabal o Txiki Lombraña vayan a presenciar demasiados encuentros desde el banquillo. Lo mismo se puede decir de José Cases que, hasta ahora, sólo se ha perdido el encuentro de El Alcoraz, en el que no pudo participar por lesión.

El resto parece tenerlo mucho más complicado para asegurarse un puesto en el once. Los responsables de la planificación deportiva se felicitan por haber cerrado una plantilla con un mínimo de dos jugadores por puesto, lo que aumentará la competencia y, en principio, también el reparto de minutos.

Álvaro Martínez y Txiki mantienen su pugna por el lateral derecho -ganada hasta el momento por el primero-; Germán Beltrán respira por ahora, pero la recuperación de Codina puede devolverle al banquillo; Tiko y Tokero progresan para ganarse un puesto...

Y qué decir del centro de la defensa, en el que Jokin Etxaniz -titular en las tres primeras jornadas y fuera de la convocatoria ante el Celta-, Ander Alaña, Txema Añibarro y, cuando se recupere, Biel Medina, se disputan la posibilidad de acompañar a Jon Urzelai, el único del que, de momento, no ha querido prescindir Pouso.

Si el tópico es cierto y la competencia es positiva para el equipo, las cosas no pueden ser mejores para el Eibar.