Poco después las 10.00 de ayer José Mari Morentin, de 50 años de edad, pasó de nuevo a disposición del Juzgado de Instrucción nº 1 de Lizarra, después de que el día anterior no pudiera acabar su declaración ante el juez por sufrir un desmayo. Poco después de las 14.30 de anteayer tuvo que ser atendido en el Hospital García Orcoyen de Lizarra, y pocas horas más tarde obtuvo el alta médica.

A la entrada en los juzgados afirmó, a preguntas de los periodistas, que él no sabe dónde está María Puy Pérez Ezpeleta. En concreto, entró a declarar ante el juez a las 10.20 y salió en torno a las 13.00horas. En una vistilla celebrada posteriormente, se determinó prisión provisional comunicada y sin fianza.

El juez le imputa los delitos de «quebrantamiento de medida cautelar» por no cumplir una orden de alejamiento sobre la desaparecida, María Puy Pérez Ezpeleta; otro de «tenencia ilícita de armas», ya que en un registro realizado por los agentes el lunes en su domicilio se intervinieron varias armas, para cuya posesión no está habilitado, y un tercer delito de «depósito de municiones».

Por incumplir la orden de alejamiento se le podría imponer una pena de seis meses a un año; por la tenencia ilítica de armas podría ser condenado a una pena de entre uno y tres años, y por último de dos a cuatro años más de cárcel porque estas armas se localizaron modificadas.

El ex compañero sentimental de la vecina de Lizarra María Puy Pérez Ezpeleta, desaparecida desde el sábado, volvió a insistir ayer en su inocencia, tal como lo había hecho el día anterior. Así, a su llegada al Juzgado de esta ciudad para prestar declaración aseguró a los medios de comunicación que él no ha tenido nada que ver en este caso sin esclarecer.

«Más tarde o más temprano se sabrá la verdad, toda la verdad. Yo no he sido», manifestó ante los numerosos periodistas que le esperaban en la puerta del Palacio de Justicia, adonde llegó esposado y acompañado por agentes de la Policía Foral y la Guardia Civil.

Sin embargo, de su declaración ante el juez no ha trascendido nada de forma oficial, dado que el magistrado ha decretado el secreto de sumario.

Por otro lado, a primeras horas de la mañana se reanudaron las labores de búsqueda de la desaparecida. El dispositivo está integrado por agentes de la Policía Foral y de la Guardia Civil y efectivos del servicio de bomberos de la Agencia Navarra de Emergencias. El rastreo se estuvo realizando principalmente en la zona de Ordoitz, y también se extendió a Jurramendi y a las zonas de Aiegi, Iguzkiza y Villamayor de Monjardin.

Fuentes de la Policía Foral manifestaron que desde este cuerpo no se sabe ya dónde indicar que prosiga la búsqueda, porque se ha rastreado la sierra de Urbasa, el pantano de Allotz, el río Ega y diversos puntos más concretos que José Mari Morentin había señalado como posibles lugares en los que podría encontrarse el cuerpo de María Puy Pérez.

Nueva concentración vecinal

A la vista de que esta vecina continúa sin aparecer -hoy se cumple una semana desde la última vez en que apareció en público-, vecinos de Lizarra han convocado una nueva concentración para hoy ante el Ayuntamiento de la ciudad como muestra de solidaridad y de apoyo hacia la desaparecida y sus familiares.

Anteayer ya se realizó una primera concentración en el mismo lugar, en la que participaron familiares de María Puy Pérez, los miembros de la corporación municipal y cerca de 300 vecinos de Lizarra.