Campeonato del Cuatro y Medio
Los fundamentos le bastan a un Irujo que promete
El de Ibero basó su clara victoria en el saque y el remate posterior para encadenar 13 tantos consecutivos que le llevaron directamente del 9-9 al 22-9. El campeón de 2006 se anotó 9 tantos con la jugada inicial.
MARTINEZ DE IRUJO 22
Asier AIESTARAN | DONOSTIA
Cada vez que Juan Martínez de Irujo salta a la cancha de un frontón los pelotazales se ponen en posición de alerta. Su trabajo es seguido siempre con lupa. Y si el partido a disputar corresponde a un campeonato oficial, la expectación es todavía mayor. Hemos llegado a disfrutar mucho con el juego del navarro en el pasado y nos resistimos a creer que aquellas gestas no volverán a repetirse.
El de Ibero se estrenó en la competición con una clara victoria sobre Asier Olaizola (22-9) y volverá a estar en la liguilla de semifinales por tercera vez consecutiva. A punto de cumplir 27 años -lo hará este martes-, parece que las lesiones le han dado una pequeña tregua y los destellos de genialidad mostrados en la segunda mitad del choque de ayer nos hacen pensar en que podremos disfrutar de la mejor versión de Irujo durante las tres próximas semanas. El campeón de 2006 promete grandes emociones.
Para ello, será necesario que Irujo se concentré en explotar sus mejores virtudes y olvidarse de extrañas recetas de dudoso rendimiento. Por ejemplo, muchos aficionados no se explican los dos o tres saques al ancho que ejecutó el delantero navarro en los primeros minutos del encuentro. Más aún cuando uno de ellos se le escapó a la contracancha con la consiguiente falta de saque para el navarro.
Ese tipo de artimañas está bien para gente con pocos recursos que se saben inferiores en el peloteo cuerpo a cuerpo. Pero Irujo es capaz de sacar, pelotear y terminar como el mejor. No necesita nada más. Lo demostró en el parcial de 13 tantos consecutivos que le llevó diectamente del 9-9 al 22-9, basando su juego en un saque-remate endiablado.
Asier, hasta la decena
No hay que quitar ningún mérito a Olaizola I, que estuvo en el partido hasta el 9-9 y que hizo sufrir a Irujo en la primera mitad. Aunque los errores del rival le ayudaron, Asier aprovechó su saque y se mostró sólido en el peloteo. Pero dos pasas fueron demasiado regalo y el de Goizueta comenzó a tener problemas en el resto hasta el punto de recibir nueve tantos de saque. Demasiados para ganar a un rival de enjundia. Hay que quedarse con lo positivo: tras un verano bastante flojo, el mayor de los Olaizola, semifinalista en el último Manomanista, vuelve a demostrar su valía.
La sonrisa de Juan Martínez de Irujo al final del encuentro hablaba por sí solo. «Tenía claro que la clave era acertar con el saque y que si lo conseguía no me lo iba a pensar dos veces para entrar de aire. La primera parte ha sido dura, pero en la segunda mitad he acertado y ha sido más fácil de lo que pensaba. Ha sido perfecto -dijo por esa segunda mitad-. No le he dejado jugar cómodo, porque si Asier saca el cañón que tiene en la derecha te hace mucho daño. En la primera parte la pelota me atropellaba y no podía hacer mi juego. Estoy contento por entrar en las semifinales. En el primer partido siempre tienes un miedo a perder terrible y ganando te aseguras entrar en cuartos el próximo año».
