Ayer se conoció que nueve concejales de UPN -también un senador, José Cruz Pérez Lapazarán,- se han dado de baja de este partido para irse al PP, ante lo que desde el partido que dirige Miguel Sanz reprocharon a la formación de Mariano Rajoy que su refundación en Nafarroa, una vez roto el pacto que mantenían desde hace 17 años, se esté haciendo con personas que llegan «con el acta de concejal debajo del brazo».

Así se expresó el secretario general de UPN, Alberto Catalán, que también hizo mención de un artículo que Rajoy publicó ayer en «Diario de Navarra».

En su escrito, el líder del PP explica que aunque la refundación de su partido en Nafarroa «tiene carácter definitivo», «no se hace contra nadie, y menos aún contra UPN», formación a la que tenderá siempre la mano porque es «mucho» lo que les une y «poco» lo que les separa.

Sostiene también que la refundación del PP en este herrialde no llega por «gusto», sino porque las circunstancias así lo exigen.

Catalán, por su parte, en declaraciones a la agencia Efe valoró que lo manifestado en su artículo por Rajoy no constituye sino «palabras muy bonitas pero huecas», ya que «no se corresponden con los hechos». A este respecto, se refirió al cambio de chaqueta de algunos ex compañeros de partido, que se han pasado al PP sin intención de renunciar al acta de concejal.

«No parece lógico que el día en el que aparece ese artículo se conozca que diferentes cargos municipales que fueron en listas cerradas de UPN se den de baja para darse de alta en el PP y que tengan actas de concejales que son de la lista en la que concurrieron a las elecciones», argumentó el dirigente de UPN. A su parecer, estos hechos «vulneran cualquier principio democrático que se quiera defender».

«Puede irse perfectamente»

Tras señalar que «los votos no son de las personas, sino de la candidatura de la que formaban parte», pidió a los electos que se han ido al PP que devuelvan el acta. «Si alguien no está de acuerdo con lo que se ha hecho en UPN y es un cargo público, lo dice, entrega el acta y puede perfectamente irse a casa o incorporarse a otro partido político», agregó.

Rajoy, por su parte, en un mensaje dirigido a su eventual clientela navarra, puso en valor la actuación del PP y su «apoyo incondicional a la libertad del pueblo navarro y su voluntad de hacer frente a cualquier intento de conducirlo, contra sus deseos, a una integración política en el País Vasco». En este sentido, se refirió a su postura contraria a una negociación entre el Gobierno español y ETA en el fallido proceso de diálogo, cuando, según la interpretación del político conservador, «Navarra estuvo en juego en la mesa de conversaciones».

Junto a ello, ensalzó el apoyo dado por su partido a proyectos como la construcción del embalse de Itoitz, el Canal de Navarra, o el Tren de Alta Velocidad.