«Somos conscientes de los beneficios que podría darnos estar en la SGAE»
Fran, Xabi y Amets | Componentes del grupo Hesian
Pablo CABEZA | BILBO
Raspando en la primera capa de la memoria musical de Sakana, Nafarroa, aparecen nombres como La Jesse James Band o Burni (Luisillo sigue en activo como bajista de Vendetta y, de paso, como medio de transporte para Hesian), bandas que dejaron unos cuantos buenos discos como testigos de una época. Tiempo después, las guitarras toman las manos de nombres como Stupenda Jones, Vendetta o Hesian, grupos que añaden nuevas formas a la difícil proyección musical desde Sakana.
Hesian acaban de publicar «Herriaren oihua», que completa la positiva aceptación obtenida con su primera demo, que les permitió, entre otras cosas, ser una de las formaciones más demandadas del año.
La historia de Hesian comienza en otoño de 2005 cuando Xabi Seko (bajo, de Altsasu) y Fran Urias (guitarra y voz, de Etxarri) dejan Dubet. Cada día que pasa sienten mayor necesidad de volver a la disciplina de la música, de las canciones. Un día entablan conversación con Etxebe, batería de Ekintza Zuzena. Entre los tres deciden calmar el mono en un local de Etxarri tocando versiones de grupos como Rancid, Blink 182, RIP o Green Day. Por cuestiones de estudio, Fran comparte piso en Gasteiz con Amets Larraza (voz, de Etxarri). Amets se pasa los días cantando sus composiciones, de sobrio tono para ser sólo un pasatiempos. Mientras tanto, en otro lugar, el trío se cuestiona su formato. Falta algo.
En una noche de juerga, los chicos toman aliento y deciden que es el momento de comentarle a Amets que si quiere ser la voz del nuevo proyecto. Ella les responde -al día siguiente- que sí, que de acuerdo. Los chicos flipan y se produce el primer punto de inflexión. Las cosas están más claras, pero presienten que necesitan un guitarra más. El elegido es Erik Andueza (de Arbizu), que acepta. En agosto de 2006 les surge la posibilidad de debutar en directo. Se trata de un bolo informal en el gaztetxe de su localidad, Etxarri, pero los nervios no saben de coleguismos. Fran no come en todo el día y, además, se bautizan sobre la marcha como Saidi Meidi.
Para febrero de 2007 ya tienen nuevo nombre, Hesian, tomado de la letra de una canción de Su Ta Gar. Umm ¡Fran sueña con un grupo de versiones de Metallica!. Apenas asomando la cabeza más allá del local de ensayo, les proponen que compongan la canción de la campaña Euskal Herriak Autodeterminazioa. La idea es que sea festiva, por lo que piensan en darle un toque ska apoyado en vientos, así que contactan con Eneko Garziandia (trompeta, de Olazti), Aritz Igoa «Igotxo» (saxo, de Etxarri) y Buton (trombonista). Buton les deja en mayo de 2007 para tocar el bajo en Gatillazo, en su lugar entra Karlos Azpilikueta (de Barañain).
Por primera vez Hesian se siente completo. Nacieron como un grupo inclinado hacia el jarkore-punk, pero como también se quedan con los vientos, añaden, definitivamente, el toque ska a su música. A mediados de 2007 aparece la primera demo, «Maite dugu», de fuerte repercusión y ventas. En 2008 llega el apoyo del sello GOR y, consecuentemente, el lógico disco debut, «Herriaren oihua».
El álbum se mueve entre el jarkore melódico, el ska y algunas guitarras que puntualmente pueden sonar metálicas, sin obviar algún desnudo vocal de Amets compatible con el folk. Una exuberante mezcla que aún se dinamiza más gracias al excelente equilibrio vocal alcanzado por Fran y Amets, además del arduo trabajo melódico con raíces en el jarkore internacional.
El resumen es que Hesian ha completado un disco intenso, ágil y fresco. El justo camino para prolongar el éxito de su punzante directo.
Un método de progreso es la experiencia, ¿de qué les valió el trabajo de la primera maketa?
Xabi: De mucho. Hemos aprendido a funcionar en grupo, a saber lo que es tener que currarte los temas a saco para ir a un estudio y grabar a contrarreloj, disbribución... Si quieres hacer algo serio, tienes que asumir compromisos, además de diferentes aspectos del grupo que ni intuíamos.
Amets: Al grabar en un estudio te das cuenta de cosas a las que antes no le dabas importancia, como las voces, donde hemos aprendido a empastar, cuidar los finales de las frases...
Fran: Técnicamente hemos visto cómo funciona una grabación: separar las guitarras en pistas, grabar bases y luego arreglos, cosillas así.
¿Y el disco qué añade a su curva de aprendizaje?
X: Se podría decir que la grabación de este disco ha sido más profesional. En la composición, además, ha habido mayor colaboración y comunicación entre todos. En principio este disco lo vemos como una continuación de la maketa, porque todo ha ido muy rápido. Pero sí que nos hemos dado cuenta de que ahora le damos más vueltas a las cosas y somos más exigentes.
¿Ha habido algún grupo que les mostrara la mejor manera de cantar a dos voces?
F/A: No. Teníamos claro que queríamos utilizar la movida de las dos voces para hacer algo que nos diferenciara de los demás. El resto ha sido trabajo de autoaprendizaje.
Publican con un sello independiente de contrastado y serio trabajo, GOR, pero bajo licencia Creative Commons (disco copiable si no hay ánimo de lucro...), lo que conlleva que no cobren -como sí lo hacen algunos socios de SGAE-, por sonar en las radios o actuar en las fiestas de pueblos y ciudades, por ejemplo. ¿Es el camino adecuado para que surja el cambio, un nuevo concepto de la autoría?
X: Somos conscientes de los beneficios que podría darnos estar en la SGAE, como los que mencionas. No obstante, cuando nos planteamos el tema de las licencias, una cosa que teníamos clara es que a pesar de las posibles ventajas, aunque discutibles, no compartimos para nada los métodos oscuros que utiliza la SGAE para beneficio de sus grandes «estrellas». En realidad, no abría sido coherente pertenecer a una sociedad con la que no estamos de acuerdo en nada de lo que hace. Como tampoco sería coherente prohibir la libre distribución de nuestra música, cuando nosotros mismos descargamos música de Internet, igual que no sería coherente defender una determinada lucha en la que no creemos.
Lugar: Doka Kafe Antzokia de Donostia.
Fecha: Sábado 15.
Hora: 21.00.
Precio: 6 euros.
«Tampoco sería coherente prohibir la libre distribución de nuestra música, cuando nosotros mismos descargamos archivos de música de Internet»
«En principio este disco lo vemos como una continuación de la maketa, porque todo ha ido muy rápido. Pero ahora somos más exigentes»
¿Hesian es un medio de vida y/o un método de expresión social con objetivos?
A: Somos un medio de expresión social y político. Desde un principio teníamos claro que el grupo era un medio muy bueno para expresar nuestras ideas y, a la par, hacer reflexionar a la gente en la medida de lo posible. También creemos en el oficio de músico, porque sabemos todo el trabajo que supone: horas de ensayo, carretera, horas eternas entre prueba y bolo... Si algún día pudiésemos convertir esto en un medio de vida digno, ¿por qué no?
¿Complicado concienciar en estos tiempos tan banales y superfluos?
F: Lo complicado sería no «predicar» en estos tiempos tal y como están. Tratamos de dar nuestro punto de vista acerca de los temas que nos preocupan, intentando que la gente que escucha nuestras letras reflexione o se conciencie. La música para nosotros es un arma de comunicación muy importante. No nos consideramos "predicadores", ni mucho menos; para algunos seremos una bandera y para otros un simple trapo. Eso no se puede cambiar. Lo importante es que nosotros entendamos lo que hacemos y decimos, nada más.